Las 5 Mejores Películas de George Raft
Nace el 26 de septiembre de 1901, en los Estados Unidos el actor George Raft, conocido por sus papeles de gánster en cintas de las décadas de los 30y 40.
Sus principios en la escena del espectáculo fueron como bailarín, para 1929 se trasladó a Hollywood, actuando en pequeños papeles, logrando el reconocimiento por su participación en el filme “ Scarface” de 1932. Su convincente interpretación lanzó dudas sobre si George Raft era verdaderamente un gánster. Él fue amigo de varias figuras del crimen organizado, incluyendo a Bugsy Siegel, Owney Madden y el sospechoso del asesinato de Siegel, Meyer Lansky.
George Raft fue considerado uno de los más elegantes actores de Hollywood, y consiguió una celebridad que no se debía enteramente a la calidad o popularidad de sus películas. Fue uno de los tres actores más populares interpretando a gánsteres en la década de 1930, siendo los otros dos James Cagney y Edward G. Robinson, con quienes trabajo en algunas películas.
Se comenta que rechazó protagonizar películas como “High Sierra”, “El halcón maltes” y “Doble identidad”. También fue capaz de satirizar su imagen de maloso en la película “Una Eva y Dos Adanes”. Raft falleció a causa de una leucemia, con 79 años, en Los Ángeles, California, en 1980.
Un actor que se convirtió en un ícono al nunca saberse si en la vida real era o no, un gánster. Sirva de recuerdo cinco de sus películas:
Bonus – Casino Royale (John Huston, 1967)
POR EL FETT
La primer sátira sobre James Bond es mala, por momentos muy, muy mala, sin embargo su existencia se convirtió en un desfile de estrellas que permitió a la audiencia ser testigo de algunas facetas cómico – paródicas de sus actores favoritos del Hollywood clásico ya entrados en años (William Holden, Charles Boyer, Orson Welles, Woody Allen, David Niven, Deborah Kerr, George Raft, Jean-Paul Belmondo y el mismo John Huston). Por supuesto lo mejor de la cinta es Peter Sellers como Bond, James Bond, en otro despliegue de locura físico – verbal que Huston no puede sostener más allá de 30 minutos del metraje. Años después llegaría la mejor parodia llamada “Austin Powers”, enterrando a este experimento fallido
Black Widow (Nunnally Johnson, 1954)
POR EDGAR DEL VALLE
Película estadounidense dirigida por Nunnally Johnson y protagonizada por Ginger Rogers, Van Heflin, Gene Tierney y George Raft. En la filmografía de Raft esta cinta de cine negro sobresale por el hecho de que no aparece como gánster sino como un detective que investiga la muerte de una escritora. Filme en donde el actor aparece sólo en la segunda parte y que fue recibido con críticas mixtas sobre su desempeño, pero que se mantiene como una excelente curiosidad tanto dentro del género como alrededor de su acostumbrado arquetipo. Destaca también el uso de un mayor tono melodramático que si bien no encaja tan bien en la narrativa, si denota un estilo diferente dentro del genero noir
5 – Some Like It Hot (Wilder, 1959)
POR EL FETT
Utilizando el elemento criminal como un soberbio recurso macguffin, Billy Wilder construirá una de las más adorables y sensuales bombas cómicas de la historia, una explosiva y vertiginosa odisea romántica que tuvo que necesitar de Wilder, el dominio dramático de Curtis y la gran capacidad humorística – actoral de Lemmon, para contener la belleza y carisma, pero también la incapacidad actoral y problemas emocionales de una radiante Marilyn Monroe. El resultado es imprescindible, regalando varios de los más grandes momentos y diálogos dentro de la comedia fílmica, incluyendo por supuesto uno de los más grandes finales de la historia. Aun con sus problemas, Wilder junto con Olivier supieron forjar y/o encausar el indiscutible pero escondido e inestable talento de Monroe.
4 – Manpower (Raoul Walsh, 1941)
Por El Fett
Al mero estilo de Raoul Walsh, con un inicio envolvente y con un final soberbio, ironicamente también se encuentra como una especie de curiosidad dentro de su filmografía, adquiriendo el estilo de una comedia “sofisticada”, pero llevándola a un estrato social más bajo donde la crítica social al sindicalismo y lo “aspiracional” están siempre a la vuelta del guion con una excelente precisión y equilibrio en este triángulo amoroso de mucho drama, pero también comedia ácida y diversión. Ahora, dentro del término actoral tenemos a los dos grandes gángsters del cine, Edward G. Robinson y George Raft, desviviéndose por una Marlene Dietrich que exporta su femme fatale a una historia de índole más romántico. Vale mucho la pena redescubrir esta excelente película
3 – Scarface (Hawks, 1932)
Por El Fett
Al nivel del remake de De Palma (y a mi gusto mejor, gracias a su mejor compactación argumental), Howard Hawks y su amigo Hughes, revolucionarían el cine gansteril con muchas trabas y prohibiciones, pero asentando el tono violento e hiperrealista de este tipo de thrillers criminales desde principios de los 30. Ingeniosa, tempranera, revulsiva en todo sentido, el estilo de Hawks se encuentra implícito en este cuento de ascenso y degradación humana, solo que aquí visto desde un término más romántico y/o emocional que del de poder (algo que agregó De Palma de manera soberbia). Paul Muni por su parte hace un menos caricaturesco, pero igual de sublime gángster que su futura versión en manos de Pacino.
2 – Rogue Cop (Roy Rowland, 1954)
POR EL FETT
Uno de los papeles que revelan la capacidad histriónica y totalmente desperdiciada de Anne Francis, dentro una cinta que merecería estar dentro de la alta alcurnia del cine noir. Un relato de venganza, corrupción policial y mafia, en donde un policía de dudosa moral deberá buscar a los gánsteres asesinos de su hermano entre conspiraciones y un par de femme fatales. Aunque Francis no carga con el protagónico, da una actuación muy convincente como la alcohólica y trágica chica del antagonista, en una narrativa que adquiere cierta coralidad gracias a un excelente ritmo e impresión de suspenso. Joyita oculta del género
1 – They Drive by Night (Raoul Walsh, 1940)
POR EL FETT
Gran combinación entre thriller y noir que fue el causante no solo de exponer la presencia de Ida Lupino, sino también de erigirla como una de las piezas fundamentales del cine negro en lo que para muchos es su mejor y más odiosa actuación, la de la esposa de un empresario dueño de camiones que se encuentra obsesionada por uno de los trabajadores, un George Raft también genial y que, en su asociación con Bogart, despliega una historia sobre fraternidad, traición e infidelidad del más alto nivel y tensión. De un ritmo fabuloso y una muy oscura historia de chantaje, Raoul Walsh quizá tenga aquí su pieza más emocionalmente compleja al centrarse en el desarrollo de su gran villana, con varios arcos dramáticos que alimentan el chantaje de manera fastuosa