Las 5 Mejores Películas de Stanley Donen
Aunque su nombre puede sonar totalmente desconocido para las nuevas generaciones, Stanley Donen fue uno de los creadores y maestros del llamado “cine musical” en Hollywood, estableciendo las reglas narrativas y coreográficas en muchos de los clásicos de antaño y con ello posicionándose también como uno de los directores cómicos más finos del panorama fílmico.
Nacido un día como hoy de 1924, Donen comenzó su carrera artística siendo precisamente bailarín, motivado por su misma afición al cine y a Fred Astaire. Al graduarse a los 16 años, viaja a Nueva York donde consigue trabajo en varias obras de Broadway, sellando su destino al conocer a su futuro amigo y asociado, Gene Kelly, el cual lo invita a unírsele como directos asistente y coreógrafo a Hollywood, comenzando su carrera como tal en 1949 co-dirigiendo “On the Town”.
Aunque nunca ganaría un Oscar (más que honorario), su contribución al mundo del cine musical fue mayúsculo, sentando las bases del mismo y proveyendo a este no solo de espectaculares coreografías, sino también de un equilibrio dramático y una comedia muy fina. Dicha influencia también sería confirmada por un León de Oro a toda su carrera.
Dirigiría 29 largometrajes, abandonando al cine en 1984 tras una seguidilla de fracasos que lo desaparecerían del mapa comercial desde la década de los 70. Donen fallecería apenas hace un par de años a los 94 años, el 21 de febrero de 2019
Recordemos al maestro musical con sus 5 Mejores Películas
Bonus – Staircase (Stanley Donen, 1969)
Por Edgar del Valle
En 1969, rodó una atrevida tragicomedia de temática gay: La escalera, dirigida por Stanley Donen. Con Richard Burton, interpretó a una pareja de peluqueros homosexuales que viven en un abierto “matrimonio” y que viven de los ingresos de su peluquería. Una película incomprendida en su momento, que permite conocer la gran capacidad de Harris para la comedia en una constante y excelente química con su socio Richard Burton. Su sencillez narrativa y su desnuda ornamentación no hacen sino incrementar la fuerza de su tesis, que es la crítica social ante el drama que se suscita debido a que uno de ellos es apresado y acusado por cargos a la moral. Cinta cómica de un excelente equilibrio
5 – Funny Face (1957)
Por El Fett
Para algunos es considerado el último gran musical de la época de oro, mientras que para otros la separación no definitiva pero si simbólica de Donen hacía con el género musical (de aquí en adelante y con el término de esa era de apogeo musical, Donen experimentaría con la comedia romántica y hasta con el suspenso, como veremos a continuación). Divertidísima e inundada de un carisma desorbitante por parte de Hepburn, Donen comprende que esta “mujer bonita” deberá acaparar toda la cámara mientras Astaire se encarga de sus coreografías. Doble efecto surte pues su asociación fílmica con Hepburn (que se extenderá en los próximos años), la cual le proveerá un vehículo de prominente dulzura a sus diálogos y momentos.
4 – Two for the Road (1967)
Por El Fett
Esta tragicomedia romántica es doblemente interesante. Para empezar estamos ante una road movie pintoresca y excelentemente actuada que pone de relieve una “historia de matrimonio” en decadencia y que busca reconectarse a través de su pasado y un viaje de Londres a la Riviera francesa. En un segundo plano el diseño de producción, vestuario y hasta fotografía ensalza a una Hepburn que aquí logra cierta profundización de su “personaje” ideal y ya dominado en su carrera, en mucha parte gracias a ese tono más melodramático y trágico alrededor de un “amor” que no es lo que se esfuerza por aparentar. Resulta muy convincente, siendo quizá su última buena película como director, pues la debacle vendría después.
3 – On the Town (1949)
Por El Fett
El debut directivo de Donen (y en general dentro del mundo fílmico), fue poco más que impresionante: fue revolucionario. La mancuerna entre Kelly y Donen irrumpieron con mucha fuerza gracias a que este par llevó los musicales hacía el exterior, abandonando los acostumbrados espacios cerrados de los sets y proveyendo al género de no solo otro estilo, sino de otra vida, inyectándole agilidad, mayor espectacularidad y por supuesto soltura en sus coreografías. Si hay algo que reconocerle tanto a Donen como a Kelly, es que sus musicales ponen feliz a cualquiera, incluso con una trama tan simple pero divertida como esta donde Sinatra y el propio Kelly son dos marineros que buscan el amor durante sus 24 horas libres. Esto es una joyita del cine musical
2 – Charade (1963)
Por Edgar del Valle
Lo irónico es que su cinta más reconocida en individual no pertenezca al género musical, sino a una rareza de suspenso y romance dentro de su filmografía poco tiempo después del fin de la época de oro de dicho terreno musical en Hollywood. Una comedia de intriga llena de refinados ambientes que explotó la química de su extraordinaria pareja protagonista, un cruce entre el cine de Hitchcock y el de Ernst Lubitsch, Donen denotaría un manejo dramático y actoral soberbios, en la historia de una mujer que al pretender el divorcio de su marido, es informada que éste fue asesinado por sus cómplices en un robo multimillonario y que es necesario que con su ayuda se recupere el mismo y se detengan a los implicados.
1 – Singin’ in the Rain (1954)
Por Kim Tobías
El musical en todo su esplendor. Música e historia embonados magistralmente para trasladarnos a una experiencia rítmica soberbia en donde sin duda Gene Kelly es el protagonista (y director junto con Donen, marcando su segunda y última gran colaboración). Un despliegue de pasos de tap y jazz cautivantes que inevitablemente formarán una sonrisa en aquel que sepa disfrutar de este género del cine. Alegre, graciosa y creativa, son algunas de las características que hacen de esta película una de las más renombradas de la historia del celuloide, llenando con su esencia inigualable hasta el ojo más crítico mientras nos adentramos en un viaje de los años 20’s viviendo cine dentro del cine.