Las 5 Mejores Películas de Vince Vaughn
Actor, productor, guionista y dueño del gimnasio Average Joe’s, Vince Vaughn perseguiría su sueño de Hollywood cuando los 18 años se mudara a Los ángeles. Tras una serie de castings donde sería rechazado de series como “Friends” y actuar en varios comerciales y roles menores en la pantalla chica, su primera e importante oportunidad se daría en la cinta “Rudy”, para después pasar a llamar la atención tras su rol en “Swingers”.
Vince Vaughn tomaría la comedia como primera opción, adepto al humor burdo de la corriente fijada por figuras como Stiller y Wilson, son quien haría una gran mancuerna. Entrado en edad, diversificaría su carrera con roles dramáticos e incluso violentos, demostrando que a pesar de tener una sola pinche expresión facial, era capaz de encausar su rostro de ladrillo hacía otras latitudes. Más simpático que en realidad bueno, su aceptación en Hollywood y hacía con el público internacional lo llevaron a ser el cuarto actor mejor pagado de la pasada década, por lo que valdría la pena repasar un poco de su mejor y/o más disfrutable y absurda filmografía
Bonus – The Lost World (Steven Spielberg, 1997)
POR EL FETT
Una secuela – aventura lamentable, pero que logró sobrevivir al olvido (y postrarse en la televisión) por ciertas secuencias de Spielberg (la escena de los dos T-Rex que atacan el camión de los protagonistas es a pesar de todo, un manjar de buena tensión y entretenimiento) y por su ensamble actoral, el cual incluía el carisma de Jeff Goldblum, la naciente y talentosa presencia de Julianne Moore, el apogeo de Pete Postlethwaite y un muy joven Vince Vaughn, que sirve como mediador entre la excentricidad de Goldblum y el equilibrio dramático de Moore en lo que más que ciencia ficción, se convierte en su segundo acto en una película de aventuras mala, pero al final entretenida
Bonus – Dragged Across Concrete (S. Craig Zahler, 2018)
POR EL FETT
El cine de Zahler no es para todos, es una combinación de elementos de acción, suspenso, serie b, western, thriller y gore que crean una marca indeleble tanto en lo visual como en lo narrativo, comenzando con una estructura meticulosa y tono lento que progresivamente acelera para llegar a un clímax repleto de giros, violencia, sangre y literales tripas expuestas. Dragged Across Concrete fue una propuesta interesante que revitaliza el “buddy movie” policial de la mano de una visión muy violenta y sin concesiones, combinada con una buena dosis de tensión y un par de diálogos de humor negro ¿Lo mejor? que también incluye a un demencial y “badass” Mel Gibson y su armoniosa química con su compañero, Vince Vaughn
5 – Dodgeball (Rawson Marshall Thurber, 2004)
POR EL FETT
Para mi “el gusto culpable” por excelencia. La imbecilidad del libreto y sus pésimas actuaciones son tan excesivas y poderosas que parecen causar un efecto químico en el cerebro, en donde la masa encefálica se ve expuesta ante tanta estupidez y en consecuencia, se rinde ante ese ataque de gags físicos, diálogos babosos, estereotipos groseros y nula corrección política (siendo Stiller la punta de lanza de estos excesos) ¡Demasiado que soportar! Para el momento de la aparición de Chuck Norris todo está consumado ¡Te has vuelto un fanático del Dodgeball con un alto grado de empatía hacía el Peter de Vince Vaughn y su gimnasio! Su legado confirma la expansión de esta enfermedad neuronal, creando una ola de fanáticos (su servidor entre ellos) que incluso instituyeron el deporte de manera profesional
4 – Into the Wild (Sean Penn, 2007)
Christopher Johnson McCandless de 22 años y con una licenciatura en Historia y Antropología ya terminada, tenía todo para ser un hombre de éxito: Harvard le abría las puertas pero él tenía en mente otra cosa. Hastiado de sus padres materialistas e hipócritas, y del mundo del capitalismo, decide dejarlo todo y emprender el viaje de sus sueños, cruzar todo Estados Unidos y llegar a Alaska. En ese momento Christopher muere y decide llamarse Alexander Supertramp; la narración se divide entre el viaje de Alexander por todo Estados Unidos y su vida en ese viejo autobús en el que fue su último hogar, donde Alexander descubrió en medio de la soledad que “la felicidad solo es real cundo se comparte”. Mientras Eddie Vedder hace lo suyo con el gran soundtrack.
3 – Hacksaw Ridge (Gibson, 2016)
POR EL FETT
Con toques de Forrest Gump en su narración y Saving Private Ryan en su estética, parece que no había nadie más adecuado que Mel para dirigir este milagro bélico, tan entretenido e hipnotizador como manipulador y propagandístico, con una estética sublime que denota su maestría directiva, pero con una pobre ejecución narrativa que de nuevo denota que fuera de Braveheart, Mel prefiere la espectacularidad sobre la lógica. Para unos, una buena dosis del más puro Gibson, para otros una de las mejores y más truqueadas películas de su año con mensaje de superioridad gringa, y finalmente para otros tantos es como leer la Biblia mientras se ve una película gore.
2 – Anchorman: The Legend of Ron Burgundy (Adam McKay, 2004)
POR JOSE ROBERTO ORTEGA
Ubicada en el mundo de los noticieros televisivos de los años setenta, la película sigue à Ron Burgundy y su ego, en la lucha por mantener y prevalecer al frente del noticiero de mayor audiencia en San Francisco, posición que se ve amenazada ante la llegada de una nueva joven y atractiva conductora. Se trata de una de las películas más estúpidamente graciosas de los últimos años, cuyo reflejo audaz de la misoginia, ego personal y profesional masculino, la convierten en algo imprescindible. Plagada además de un reparto multiestelar, se permite burlarse en todo momento de sí misma y la llevan a utilizar todo tipo de estereotipos que hace funcionar a su favor. Contiene además escenas que se han vuelto icónicos, desde un enfrentamiento al modo pandillas, hasta el uso del teleprompter o a una interpretación del clásico “Afternoon Delight”.
1 – Brawl in Cell Block 99 (S. Craig Zahler, 2017)
POR EL FETT
Escondido bajo la máscara de un thriller carcelario, este acaparador descenso infernal a la deshumanización por la búsqueda de un bien mayor, regala en su lento pero disfrutable proceso a un peculiar antihéroe excelentemente interpretado por Vince Vaughn (en la mejor actuación de su vida), convincente, invencible, cautivador y estúpidamente poderoso “gorilón” que en dicha debacle de barbarie provee al relato de la lógica necesaria para sostener la hipnótica narrativa de Craig Zahler. No se deje llevar por lo correcto y tenga en cuenta que estamos ante un astuto, inteligente y emocional cine serie b, y una de las más violentas e infravaloradas películas de los últimos 10 años