Las Mejores Películas de Jean-Louis Trintignant
Uno de los titanes de la actuación y el cine francés, Jean-Louis Trintignant. Hijo y sobrino de una familia de pilotos automotrices (su padre murió en un accidente en la pista y su tío fue un afamado piloto de la Fórmula 1 que incluso ganó la carrera de 24 horas de Le Mans), Jean-Louis elegiría otro destino para su vida, el de la actuación, la cual comenzaría de manera profesional dentro de la escena teatral en 1951.
No tardaría mucho en extender su currículo hacía el cine y la televisión, debutando en las pantallas en 1955. Sin embargo, alcanzaría la fama irónicamente interpretando a un piloto de carreras en la cinta romance de culto “Un Hombre y una Mujer” en 1966, de la mano de Claude Lelouch.
Manteniéndose activo hasta el día de su muerte, Jean-Louis Trintignant completaría un currículo de más de 140 títulos entre cine y televisión, ganando los galardones de Cannes y Berlín por sus actuaciones.
Lo recordamos con sus Mejores Películas.
Bonus – Y Dios creó a la Mujer (Roger Vadim, 1956)
POR EDGAR DEL VALLE
La cinta que encumbró a Bardot como un símbolo sexual de la época y de todos los tiempos. Su contenido erótico (que hoy resulta hasta ingenuo), provocó que en algunos países fuera censurado por el comportamiento” promiscuo” de su protagonista. Película de escaso valor cinematográfico, famosa por su éxito popular y por haber lanzado al estrellado internacional la actriz de la mano del Vadim, que para esas fechas era su esposo. Como dato curioso, el propio Vadim llevaría a cabo un remake estadounidense treinta años después, con Rebecca De Mornay supliendo a su ex esposa. Así mismo, hay que destacar que además de Bardot, esta cinta le daría a Jean-Louis Trintignant su primer papel relevante y que lo pondría en el ojo de la fama
Bonus – La escapada (Risi, 1962)
Rosi logra una sátira tragicómica de la realidad de Italia de esa época, que ejemplifica lo que es la comedia italiana, bellamente cínica. Entretenida e interesante esta Road Movie, sobre un día en la vida de dos personajes disímbolos se convirtió en una película de culto, considerada como una de las mejores películas italianas de todos los tiempos (y una de las mejores comedias de la historia). Esta estupenda película, es un retrato de la vida de Italia en pleno boom económico, a través de la figura de un hombre histriónico, irresponsable, vacío, por momentos generoso y amistoso, que encarna perfectamente la sociedad italiana de los años sesenta. El personaje de Jean-Louis Trintignant es la principal perspectiva narrativa, llevándonos a un final nada esperado y que aún cala en lo profundo con uno de lo giros más monumentales y trágicos del cine
Bonus – El Gran Silencio (Corbucci, 1968)
Por Edgar del Valle
En este Spaghetti Western de Corbucci, reconocido por los fans del género como uno de los principales de dicha corriente, Trintignant interpreta a un pistolero mudo que acude al llamado de una viuda pata acabar con el hombre que asesinó a su marido. Kinski y Trintignant hacen un par de personajes legendarios para el género, villano y héroe atípicos para los comunes arquetipos y donde su inesperado final resulta otro punto de originalidad y distinción. Jean-Louis Trintignant consigue un rol dramático importante gracias a la falta de diálogo, muy adepto al entorno nevado y solitario que maneja la narración. Además, estamos hablando de una esas películas del género injustamente olvidadas por la mediación de Leone
5 – Z. (1969) (Costa-Gavras)
Por Edgar del Valle
Protagonizada por Yves Montand, Jean-Louis Trintignant, Irene Papas y Jacques Perrin. En esta película de corte netamente político, conforme a la costumbre de su director, Trintignant encarna a un Juez que tiene a su cargo el caso del asesinato de un opositor al gobierno, percatándose de que se trata de un crimen de estado y que se enfrenta a un dilema entre demostrar lo hechos y su seguridad. La película fue candidata a varios premios internacionales; destacan sus dos premios del Festival de Cannes de 1969: al mejor actor (Jean-Louis Trintignant) y el Premio del Jurado al mejor director
4 – El Conformista (1970) (Bernardo Bertolucci)
Por Edgar del Valle
Otra película de tinte político protagonizada por Jean-Louis Trintignant, bajo la batuta de Bertolucci y basada en una novela de Alberto Moravia. En este caso, el actor representa a un hombre que se convierte en miembro del partido fascista italiano que utiliza la excusa de su luna de miel en París, para buscar a un profesor italiano que huyo a Francia debido a su persecución por parte del gobierno fascista. La cinta fue nominada al premio Oscar como mejor guion adaptado, al Globo de Oro como mejor película extranjera y al Oso de Oro de Berlín. Un ejemplo de la notoria adaptabilidad y talento del gran actor francés
3 – Un Hombre y Una Mujer (Claude Lelouch, 1965)
Por Edgar del Valle
Jean-Louis Trintignant encarna a un corredor de autos viudo que se enamora de una escritora, durante un encuentro en el internado al que asisten sus respectivos hijos. Drama romántico que con el paso de los años se convirtió de culto. Fue ganadora del premio Oscar mejor película de habla no inglesa y guion original, además de 4 nominaciones; 2 globos de Oro: mejor película de no habla inglesa y mejor actriz (Aimée) y la Palma de Oro en el Festival de Cannes, entre otros premios. El tema musical se convirtió en un himno para los enamorados. Una cinta de condición imprescindible en cualquier lista de romance
2 – Amor (Michael Haneke, 2012)
Por Edgar del Valle
Drama romántico multipremiado, cuya trama gira en torno a una pareja de ancianos que viven en un apartamento en Paris, que se enfrentan a una grave enfermedad de la mujer y las limitaciones físicas del hombre para brindarle un apoyo solidario. Está protagonizada por Jean-Louis Trintignant, Emmanuelle Riva e Isabelle Huppert. La cinta obtuvo la Palma de Oro en el Festival de Cannes, ganado también un premio Óscar en la categoría de mejor película extranjera y una nominación simultánea al Óscar en las categorías de Mejor película y Mejor película extranjera. Trintignant ofrece una actuación desgarradora, siendo el artífice de ese brutal giro y cierre.
1 – Tres Colores: Rojo (Krzysztof Kie?lowski, 1994)
Un accidente será la causa de que personas, diametralmente opuestas, se conozcan y compartan instantes de sus vidas. Al atropellar a un perro, la protagonista lo llevará a su dueño (Jean-Louis Trintignant), quien no es particularmente alguien normal pues tiene como hobby espiar las conversaciones telefónicas de sus vecinos. Para muchos la mejor dentro de la trilogía de los colores, obra que explora las relaciones de una manera introspectiva, emocional y psicológica, y aquí en lo particular compleja, llevando a cabo un misterioso desarrollo de la accidental relación enfocada en el resquebrajamiento de prejuicios y la admiración entre sus protagonistas, más que carnal, emocional. La actuación de Trintignant es de antología.