Maya y Los Tres: Reseña de un arqueólogo
De nuevo aquí su arqueólogo amargado listo para tirar veneno a todo aquello que este históricamente mal. Y el día de hoy les hablaré de una de las nuevas adaptaciones de Netflix, llamada Maya y los tres. Obra de Jorge R. Gutiérrez que lo conocemos de otros trabajos como lo fue la serie de Nickelodeon: “El Tigre: las aventuras de Manny Rivera” (2007) y “El Libro de la Vida” (2014).
Pero ¿Qué es Maya y los tres? Básicamente es una miniserie infantil de 9 capítulos que está ambientada en un “mundo” “inspirado” en las culturas mesoamericanas. Nos cuenta la historia de Maya, la princesa de ciudad Teca, que está vinculada a una antigua leyenda que menciona que un día, tres guerreros dirigidos por una pequeña águila, derrocarán el reinado del terror del dios de la guerra (en la serie llamado Mictlán) para así traer la paz al mundo. Así es como la pequeña Maya empieza su aventura confiada en que es el águila de la profecía y emprende la búsqueda de los otros tres guerreros para así poder cumplirla.
Punto dos: “arqueólogo amargado ¿está historia rescata auténticamente la esencia del mundo prehispánico?” La respuesta es no, no, no y un rotundo no. Si bien esta vez no voy a ser tan duro como en el caso de Onyx Equinox, si hay algunas cosas que no tienen que ver con que todo lo que sale ahí este históricamente muy mal, sino más que nada con el aspecto del guion. Y es que desde que vez Maya y los Tres, Jorge R. Gutiérrez te da a entender que ese mundo realmente no es el México prehispánico, Teca no es Tenochtitlan, ni Maya es realmente Maya. Todo lo que vez ahí es realmente un mundo fantástico inspirado en las culturas mesoamericanas.
Okay Jorgito… te la compraría si me la vendieras auténticamente de esa forma. ¿A que me refiero con eso? Que Jorge R. Guitérrez, mezcla la realidad con la fantasía y eso crea un desequilibrio en ambas partes. Eres o no eres, y es que Maya,nos presenta un mundo fantasioso, que lo es, pero a la vez no lo es por que en algunas escenas, personajes y situaciones, te da a entender que si es el México prehispánico (de hecho hay una escena donde literal se ve que todo sucede en México), pero a su vez la serie presenta mundos y personajes ficticios, lo cual es muy peligroso al jugar con los recursos históricos de esa forma, por que generas confusión y tu proyecto carece de identidad.
Y es que no está mal que alguien quiera crear un mundo fantasioso inspirado en el México prehispánico, al contrario, lo aplaudo, siempre y cuando se deje claro que precisamente es un mundo no real y no una proyección autentica de las sociedades mesoamericanas, ya que por lo tanto no se le podría aplicar una crítica histórica, porque todo sería fantasía (es como si alguien se enojara por que el señor de los anillos no refleja la realidad del mundo medieval, pues evidentemente no lo va a ser, por que la tierra media es una creación de Tolkien que se inspiró en varias culturas del mundo medieval, y así es como el autor se puede librar de historiadores o arqueólogos quejosos que le dijeran: las espadas no eran así, el vestuario no era así… etc.)
No obstante, Maya y los tres, no deja del todo claro que sea un mundo ficticio y por partes se mete con la realidad histórica. Otra cosa nada innovadora es que Jorge solo corta palabras para formar los nombres de sus personajes, por ejemplo, el pueblo “Teca” evidentemente viene de la palabra “Azteca” y así muchos otros personajes como “Mictlan” (Mictlantecutlli), “Micte” (Mictecacihuatl) etc. En este plano hubiera sido mejor que se inventara los nombres, en lugar de cortar nombres existentes.
Pero entonces vamos al último punto: Hablando de la historia ¿vale la pena?
Maya y los tres es un experimento muy extraño hasta hablando del guion, pues la historia está completamente enfocada al sector infantil y por lo tanto, un adulto no debe esperar mucha diversión o interés. La serie está plagara de chistes muy infantiles, escenas graciosas y personajes que están diseñados más para atraer más a los niños que a los jóvenes y adultos (aunque sigo sin entender el fetichismo de Jorge Gutiérrez con las narices grotescas). Pero en algunos puntos, la serie trata de ser “seria” y de mostrar situaciones que deberían de provocarnos tristeza o sorpresa, pero como toda la serie desde el principio tiene un tono sumamente infantil, pues estas no generan impacto alguno, no se sienten reales, ni te transmiten sentimiento.
Algo me dice que Jorge trató de hacer algo similar a Avatar: La leyenda de Aang, no obstante carece mucho de alma, espíritu, identidad, filosofía y esta muy llena de chistes malos, parodias malas de lo “mexicano” y desaprovecha justamente lo que te puede aportar las culturas mesoamericanas espiritualmente hablando. La historia es MUY rápida, no te da tiempo de encariñarte con los personajes, está plagada de acción por todos lados y hay poco descanso a esta (el mismo error de Onyx Equinox). Es una historia sencilla donde el punto A tiene que llegar a un punto B para regresar al A, por lo que no esperemos la gran cosa. Todo esto me extraña, pues otras obras de Jorge, como el libro de la vida, realmente tienen muchísima más pasión, filosofía e identidad que Maya y los tres.
En Maya y los tres, los personajes son muy planos y están llenos de tantos chistes, que no le dan seriedad, y por lo tanto no hace que te intereses en ellos; quizás el único personaje agradable es el de Zats, cuenta con un muy buen diseño y personalidad. Maya es una niña insufrible, una Mary Sue que todo el tiempo solo está elevando su poder, de personalidad muy plana y un intento de personaje femenino “fuerte e independiente” pero que al final del día no lo logra (no sé qué tienen estas animaciones “mesoamericanas” que el protagonista, siempre tiene que ser el peor personaje).
Sobre los otros tres personajes principales tampoco hay mucho que rescatar, por ejemplo está Rico, un poderoso mago de orígenes muy humildes y cuyo desarrollo de personaje ya está muy “quemado”. Es decir, el típico personaje que no tiene nada, y se vuelve todo. Chimi, es una guerrera “calavera” cuyo diseño de personaje me gustó, y tenía potencial, pero al final del día no se explotó del todo. Se puede decir que es muchísimo mejor personaje femenino que la propia protagonista. Finalmente tenemos a Picchu, el mejor de los tres, con una personalidad agradable, fuerte y noble, y que curiosamente, es el que menos aparece.
Respecto a los antagonistas, salen tantos que ninguno te impacta tal cual, a excepción del principal, es decir Mictlán, que hubiese sido un grandísimo villano si la historia hubiera sido más seria, pues la realidad es que es el mejor personaje de la serie. Cumple bien su función, es intimidante y como debe de ser un villano. Además, su diseño es realmente brutal. Lastima que sea propia historia quien no le haga justicia.
No es una obra entrañable y en términos generales es anti recomendable, siendo más una parodia del mundo prehispánico que una historia que realmente proponga algo interesante. De lo positivo, se podría decir que es la propia animación, sus efectos especiales, su mundo muy colorido, pero incluso el soundtrack dejó muchísimo que desear, siendo muy genérico. Calificó a esta obra con un 4.5 sobre 10.