Momentos Favoritos del Cine: The Mist
Hace unas semanas terminé de leer el libro The Mist de Stephen King, lo que me animó a disfrutar de nuevo la adaptación cinematográfica dirigida por Frank Darabont; aunado a ello, hace un par de días vi Bird Box, producción original de NETFLIX protagonizada por Sandra Bullock, a quien, por cierto, pese a sus esfuerzos no se le da mucho el cine de sobresaltos. El caso es que estableciendo una comparación entre ambas películas de trama y planteamiento similares, puedo afirmar sin temor a equivocarme que The Mist con todo y su pinta de Cine B consigue en su totalidad ser una obra más redonda, convincente y sobre todo entretenida.
Dejo aparte Bird Box para enfocarme en The mist, no sin antes aclarar que el título con el que se conoce en México fue Sobrenatural, dado que el nombre de La niebla pertenece al clásico ochentero dirigido por John Carpenter ¿Pero qué creen queridos lectores? Resulta ser que también una cinta mexicana de horror protagonizada por Susana Zabaleta se titula Sobrenatural. En otras palabras, las confusiones con los títulos son cuento de nunca acabar. Por ello seguiré llamando a la película The mist.
The mist fue la tercera película dirigida por Frank Darabont basada en una obra del conocido Maestro del horror, siendo las anteriores La redención de Shawshank (Sueño de fuga) y La milla verde (Milagros inesperados), ambas nominadas al Oscar por mejor guion adaptado.
La novela con una extensión de apenas unas 200 páginas es trasladada a la pantalla grande con gran acierto, ya que suprime todas esas descripciones extensas y minuciosas, sello característico del estilo narrativo de Stephen King, que una vez fuera del contexto literario, no tienen mayor trascendencia, otorgando el guion del mismo Frank Darabont solo prioridad a los eventos y detalles que enganchan, conmueven y aterran al espectador.
La historia trata sobre un grupo de personas que quedan atrapadas dentro de un supermercado presa de una espesa niebla de procedencia desconocida. Al principio, el temor de los personajes cautivos radica en la incertidumbre que provoca el no saber qué está sucediendo afuera, para luego alcanzar los límites del horror al descubrir que tras la bruma se encuentran unos seres monstruosos que quieren saciar su apetito y no precisamente con las latas de conservas.
Reitero, Darabont respeta la premisa original, tomándose la libertad de hacer pocos pero muy significativos cambios, imprimiendo a las acciones mayor dinamismo, logrando así que el resultado final sea mucho mejor que el libro; lo admito aun siendo un super fan de Stephen King. Claro que, si no me creen, basta comparar el desenlace escalofriante de la versión fílmica, con el parsimonioso final abierto planteado por el novelista quien prefiere dejar todo a la imaginación.
The mist no se instala cómodamente en el lugar de monster movie, es decir, no se trata todo el tiempo de ver monstruitos aquí y allá haciendo gala de un despilfarro de efectos especiales. Los efectos están al servicio de la historia y no al revés. Claro que salen monstruos y hay algunas escenas gore, sin embargo, la cinta llega a sus puntos más álgidos cuando los enfrentamientos surgen entre los pobladores cautivos.
En lo referente a las actuaciones, Thomas Jane sin ser un histrión brinda una de sus mejores actuaciones, Laurie Holden está correcta, al igual que los secundarios Toby Jones y William Sadler. Pero es, sin duda, la antagonista Marcia Gay Harden, quien sobresale por su interpretación de la señora Carmody, personaje descrita en el libro como una anciana, presentada aquí más joven, pero igual de desquiciante, una fanática religiosa convencida de que el fin de los tiempos ha llegado y solo el sacrificio de un inocente puede salvarlos.
Recomendable para seguidores y no seguidores del señor Estefano Rey. Por cierto, si tienen que ir a comprar algún producto al supermercado o tienda de autoservicio en estas fechas decembrinas, cerciórense primero que no haya afuera una bruma blanquecina… nada más por si las dudas.
1 Comment
Quiero mucho a Stephen King pero definitivamente no sabe escribir finales, me quedo con el de la cinta. 🙂