Momentos Favoritos del Cine: “Usted dijo perpetua”
Ya dejando un poco de lado el cine clásico, hace ya varios días tuvimos la desgracia de conocer el primer trailer del remake americano de la gran película argentina El secreto de sus ojos (Juan Jose Campanella, 2009), una total burla y mega patada en el trasero para todos aquellos que sabemos disfrutar de lo bueno (claro que me incluyo jaja) y no de las migajas que le gusta patrocinar a Hollywood. Pero dentro de todo lo malo hay algo de luz, y eso fue que me inspiró a ver de nuevo esta gran cinta original que personalmente me encanta y encuentro uno de los guiones más espléndidos de las últimas décadas.
Comprenderán entonces lo difícil que es seleccionar una escena favorita de este filme, pues contiene demasiados buenos momentos: dígase el plano secuencia del estadio, la plática sobre la pasión en el bar o incluso los 30 segundos finales del metraje. Pero entonces recordé la escena que me causó más conmoción la primera vez que vi esta joya del cine moderno, un domingo hace 3 años (recuerdo bien) en el que encontré esta cinta por el vago mundo del internet por casualidad y sin la menor idea de lo que me esperaba al verla… Y con esto me refiero a uno de los momentos finales, ese en el que nos revelan el lamentable final del asesino de Liliana Colotto, un tipo sí, demasiado repugnante pero no por eso causa menos impacto su destino promovido por una gran injusticia y por ese fuerte deseo de venganza del viudo Ricardo Morales, además de impulsado por el gran dolor de perder a su entonces amada esposa. La verdad es que este momento me parece espléndido, desde el manejo de cámara, la escasez de diálogos aunado a ese par de expresiones que generan una tensión tremenda y un nudo en el estómago que me hizo rendirme ante esta película totalmente, por si me quedaba alguna duda.
Solo un par de frases fueron suficientes para hacer de esta secuencia el final perfecto de este enigmático caso, demostrando que las imágenes siempre valdrán más que las palabras (y si es con esa calidad de fotografía, mucho mejor).
