Momentos Favoritos del Cine: Jaws
Cuando era niño tuve la dicha de ver está cinta, que lejos de asustarme como al resto de esta tibia y cobarde población, me maravilló y me presentó a la criatura marina más cabrona y poderosa de los sietes mares, una criatura tan majestuosa y misteriosa que no me avergüenzo de admitir que en momentos llegue a respetar como a una deidad marítima, me refiero a esa gran cinta de Steven Spielberg: JAWS, Tiburón para la banda hispanoparlante.
Esa película la vi al extremo de aprenderme los diálogos y su timming, y por supuesto mi escena favorita fue por mucho tiempo ese momento donde Roy Scheider (de quien era fan en mi infancia) se monta en el mástil del bote que se hundía causa de este infame y poderoso escualo y pronuncia esas poderosas palabras: SMILE YOU SON OF A BITCH y ¡Pum! tripas y sangre por doquier!
Hace poco tuve la oportunidad de volver a disfrutarla y me llevó a escuchar unos comentarios desafortunados por parte de mi hermano al hacer menos el en ese entonces sorprendente robot que hicieron para representar a este Gran Tiburón Blanco, pero en su defensa le hablé del argumento y de esa escena en particular, esa que aparenta ser el cliché donde todos se conocen y ríen a carcajadas para después, sin previo aviso, dar paso a una terrible historia de como Quint, interpretado por Robert Shaw, sobrevive a una desesperante experiencia a bordo del acorazado Indianapolis.
Sin necesidad de efectos especiales, ni flashbacks abrumadores, sólo la voz de Shaw en su papel de viejo lobo de mar, narrando con un ritmo lento con lujo de detalles, casi ido, con la habilidad de reflejar el desprendimiento de su persona, como si realmente lo hubiese vivido, y es ahí, sólo ahí cuando uno experimenta el verdadero terror, donde uno se da cuenta que tan pequeño es el ser humano ante las demás especies y que tan indefensos somos fuera de nuestro elemento. El momento Favorito por excelencia.
3 Comments
Esta película tiene el honor de haberme dado el susto de mi vida, si mi memoria no me falla es en una escenas donde están buceando, creo que en los restos de un barco, y sin mas aparece flotando el cadáver de una persona victima de Bruce, estaba tan metido en la cinta que no lo vi venir. Un susto con grito y salto incluido que nunca se a vuelto a repetir.
jajaja muy buena la de Bruce. Si aquí el Spielberg logra explotar todos los miedos del espectador y esa escena ha ocasionado estragos por todos lados, no solo con usted mi estimado Chico Panadero
Saludos!