Mundial de Cine: Brasil vs México
Hay un respeto de la nación brasileña hacia la mexicana tanto en el fútbol como en el cine; en la primera instancia existe cierto elemento místico que le permite a México ser una piedra en el zapato para la selección carioca en los últimos años, donde los sudamericanos han visto derrotas en variados torneos y sobre todo en partidos decisivos a pesar de la distancia de posicionamiento y talento futbolístico. En el segundo rubro en definitiva los aztecas son los que resaltan a través de los años, sin embargo el cine brasileño goza en la cartelera mexicana de buena distribución y gusto de la audiencia.
¿Será que México marque otra de las sorpresas en Rusia? ¿Será que este favoritismo en cuanto al cine se refleje en la cancha y los espectadores? En otro americano y legendario duelo fílmico ¡Brasil vs México!
BRASIL – Cidade de Deus (Ciudad de Dios)
Director: Fernando Meirelles
Premios: 66 premios internacionales
Electrizante y bellamente desesperante resulta apreciar esta joya moderna de la cinematografía, la cual nos narra una fábula dedicada ciento por ciento al crimen ¿El protagonista? Definitivamente la Ciudad de Dios, la cual enmarca una hermosa crónica vista de los ojos y la cámara de uno de sus habitantes y de cómo él mismo es testigo del nacimiento, prosperidad y caída de uno de los líderes mafiosos mas sanguinarios que pueda recordar el cine : Zé Pequeño, el rey del barrio constituido por las agobiantes favelas brasileñas
De una selección maestra en su OST y una de los mejores montajes de la década, el film de Meirelles se construye a través de retazos estrictamente integrados para que los personajes sirvan a la ciudad y no viceversa, y es que cuando parece que la historia toma rumbos ajenos a esta, Meirelles resuelve haciendo a cada subtrama parte del verdadero motif de su film: el componer la estructura, color, vida y crimen de la misma Ciudad de Dios desde dos percepciones narrativas: la nota periodística y la fábula, comunión que agrega no solo complejidad, sino un cierto halo de inocencia y empatía hacía todos sus personajes (piezas), incluyendo a las víctimas y victimarios.
MÉXICO – El Rey del Barrio
Director: Gilberto Martínez Solares
Premios: Ninguno
Si hay algo que caracteriza el accionar o modus vivendi del mexicano es la picardía, el manejo de un humor versátil de varios extremos, medidas y picos, y por supuesto dentro de estos la sátira, en donde sin duda pudieran ser los campeones mundiales. Por esa misma razón decidí en este encuentro seleccionar para “El Tri” a otro “Rey del Barrio”, títulos símiles pero de personalidades y tonos muy distintos.
La espontaneidad en el humor de Tin Tan fue avasallante en mucha parte gracias al forjamiento de un núcleo y conglomerado creativo que trabajaba con el solo objetivo de su lucimiento. Esta disfrazada asociación llegó a su clímax cuando el Pachuco de Oro encarnó al Rey del Barrio, figura que lo posicionaría con toda justicIa como el artista cómico más completo dentro de la filmografía mexicana, que a pesar de siempre operar bajo la sombra de Cantinflas, aquí detonaría con bases sus mayores tablas en el humor físico, y no solo en el oral. La puesta escena raya en lo exótico, en lo musical, en lo surreal, donde las criaturas humorísticas de Tun Tun, Tongolele, La Vitola, el hermano Ramón y el mismo Germán van apareciendo en una oda de humor sin precedente.
¿Que Rey de Barrio prefieren? ¿Aquel que parece mortal también en la cancha de fútbol? ¿O al pícaro mexicano que siempre bajo el traje (de pachuco o del jersey verde) esconde sus defectos, pero lucha con estilo y valentía por sus objetivos?
¿Quién ganará el encuentro? Ustedes deciden el marcador con su voto en el Mundial de Cine
2 Comments
Saludos, compadre. Buena idea esta la de mezclar cine y fútbol. En mi caso, un arte que me apasiona y otro (no sé si sea arte) que me es indiferente. Pero no sé si habrá enterado de que Marruecos, Costa Rica y Panamá también cuentan con cinematografía. No habría malgastado su tiempo averiguando sobre ellas y presentándolas en este espacio.
Saludos.
Muchas gracias estimado