Mundial de cine: Dinamarca vs Francia
Tan importante es la cultura cinematográfica en estos dos países que de allí nacieron dos de las más relevantes revoluciones en el cine. En Francia la Nouvelle vague que incluye a cineastas clásicos como Francois Truffaut, Jean Luc Godard, Alan Resnais entre otros. En Dinamarca el Dogma noventero que tiene nombres tan importantes como Lars Von Trier, Susanne Bier, Thomas Vinterberg y otros, tienen en común el querer romper con los esquemas del cine Hollywoodense, lleno de clichés, historias vacías y básicamente la falsedad en el cine. Obviamente son caminos diferentes en la Nouvelle vague se dan historias mundanas sin ningún tipo de artificio, incluso llegando a trabajar sin guion. En el Dogma las historias son punzantes, viscerales y van directamente a criticar la farsa de la sociedad occidental.
Dinamarca – Dancer in the Dark
Director: Lars Von Trier
Premios: 33 premios, entre ellos la Palma de Oro y la mejor actriz en el Festival de Cannes
Para muchas personas incluyéndome los musicales tipo Hollywood son un martirio, basta con ver la última estupidez llamada La La Land. De esto también estaba hastiado Von Trier y realiza un musical rico en historia, personajes muy bien estructurados que muestran la falta de humanidad de una sociedad que hunde y lastima a las personas con menos recursos incluyendo su salud, si no tienes dinero para pagar lo mejor es morir. Hay algo bastante obvio que debe tener un musical y es buena música, algo de lo que adolecen los musicales antiguos, además incluye magníficas coreografías que permiten el desarrollo de la historia y que deja de un lado el sabor dulzón y empalagoso de este subgénero.
Francia – Bande à part
Director: Jean-Luc Godard
Premios: Ninguno
Mucho antes que los daneses se cansaran de la cinematografía gringa, lo habían hecho los franceses. Y también buscaron una salida que los alejara de ese tipo de cine pero que al mismo tiempo mantuviera el arte como algo con significado. Las historias sencillas sin ningún planteamiento exagerado y prácticamente cámara en mano les dio la posibilidad de abrir nuevos horizontes, un respiro al mundo. Y de eso se trata Bande à part, un grupo de amigos pasándola bien y deciden intentar robar la casa donde uno de ellos reside, así de simple.
Personalmente me quedó con el Dogma danés, está mucho más cerca a mis gustos cinematográficos sí bien los franceses dejaron una impronta indeleble, a veces pecan de ser demasiados ambiguos y hasta infantiles. En fútbol ya ambos clasificados creo que va a ser un empate.
1 Comment
Cualquiera de las dos cintas le gana al partido de hoy… ZZZZZZ, hasta el protagonista de Que tacaño se vio mas generoso que los delanteros del partido.