Passages: “La peor persona del mundo”… pero bisexual

Ira Sachs se ha caracterizado por exponer temáticas muy enfocadas en las relaciones de pareja, especialmente las que consideramos como tóxicas. Y ya sabemos que eso siempre da mucha tela para crear giros dramáticos interesantes y actuaciones potentes. Passages no es la excepción.

Presentada en el marco del pasado Festival de Cine de Guadalajara, la cinta cuenta la historia de un director de cine casado con un hombre que se enamora de una chica, al grado de terminar su matrimonio para estar con ella. Hasta ahí parece simple y claro todo, pero justo es en ese proceso donde descubrimos que este señor realmente no sabe qué quiere… o sí; tal vez no lo sabremos. Y es que, en la misma presentación y rueda de prensa de la película, Sachs menciona que todas las escenas están en un tono intermedio, sin indicar si es el inicio o el final de algo; es ahí donde se pierde un poco la película, pues no establece cuál es su objetivo, y a pesar de estar bien construidos los personajes, nunca descubres realmente qué buscan.

Ira Sachs mencionó también que hizo la película pensando en lo que la gente quiere ver (¿?), no en lo que él quería; puede que tenga razón, pues está plagada de momentos predecibles donde sabes cuál es el siguiente movimiento de los personajes. Y ahí le caemos en una (otra) mentira, pues para él, la posición de poder está siempre itinerando entre los tres protagonistas, donde no hay “victimarios” (cuando claramente puedes ver que hay dos víctimas afectadas por el personaje principal).

Donde sí acierta “Passages” es en decir que la película se pensó para disfrutar del placer de ver cine, del placer del sexo y los cuerpos, pues hay escenas sexuales suficientemente explícitas para asustar mentes débiles, pero es aquí donde Sachs demuestra su habilidad directiva, pues a pesar de la longitud, las escenas brillan por su naturalidad y realismo, convirtiéndolas así de lo mejor logrado de la película.

Tal vez haberla visto previamente a que el director la explicara fue un poco contraproducente, pues la película se disfruta, es ligera y visualmente agradable, muy a medio camino entre ‘The worst person in the world’ y ‘The world after us’, donde vemos estos conflictos emocionales y de pareja en las sociedades contemporáneas (¡hola, GenZ!).

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Acerca del autor

Leo Idair    

MOCATRIZ (Modelo, Cantante y Actriz) en Instagram pero humanista en la vida real. Creo en las utopías pero sin dejar la realidad fuera. Dame una buena telenovela y estoy a bordo. Mi mamá me hizo cinéfago desde chiquito.


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