Recomendaciones para escapar de la cartelera: Favoritas ganadoras del León de Oro
Vamos con el tercer ejercicio de esta índole en cuanto a favoritas ganadoras de algún festival o ceremonia se refiere, las cuales han favorecido bastante en cuanto a variedad de géneros y estilos en esta su columna mensual de recomendaciones. Al creador de esta sección, nuestro colega y estimado Bedub, ahora se le ha ocurrido voltear hacia Venecia para seleccionar a algunas de las afortunadas cintas que se han levantado con el León de Oro ¡¿Qué tal?! 7 films recorriendo el mundo que han logrado convencer al surrealista y muy estético Festival de Venecia forjando así su nombre y llevándose a casa el feroz galardón.
Las bellas Cat Movie Lee y Kim Tobías, el joven Ed Sunderland, el implacable Bedub, el ocioso de El Fett, el ñoño del Arquicruz y el español más mexicano Mr. Wolf se complacen en presentar 7 recomendaciones para escapar de la cartelera, que créanos, necesitarán para justificar e incrementar su sabiduría cinéfila mientras aprecian algunos productos de alta calidad venidos de los mejores años del Festival de Venecia
¿Y sus recomendaciones estimados y queridas lectores? ¿Cuáles serán? Se vale compartir
Pieta (Ki-duk Kim, 2012)
Por películas como estas es que seguiré sosteniendo que los coreanos son unos enfermazos. Y es que no es que sea muy adepta a la cinematografía de este país, no por falta de agrado sino que simplemente no me ha dado por ver tantas, pero siempre que tengo la fortuna de apreciar alguna de estas resulta que la historia cuenta con un retorcido giro que lejos queda de parecer indiferente.
En esta ocasión la cinta es Pietà, la cual cuenta la historia de Kang-do, un chico que trabaja para una empresa prestamista y se encarga de cobrar las deudas a la mala, pues si los deudores no pagan lo que les corresponde él se encarga de torturarlos violentamente. Así es como este tipo vive sus días hasta que una mujer se le aparece diciendo ser su madre y lo asechará durante las semanas siguientes, formando una extraña relación que incluso le impide a Kang-do hacer su trabajo.
Cargada de violencia física y sexual, el filme nos contará cómo es que un tipo que ha vivido solo prácticamente toda su vida se enfrenta a la situación de tener una posible familia de repente, lidiando con sentimientos que incluso le resultan difíciles de entender. Por cierto que el título de la película proviene de la escultura de Miguel Ángel del mismo nombre, esto por la clara referencia del concepto madre-hijo que la famosa obra de arte expresa.
Brokeback Mountain (Ang Lee, 2005)
Las películas Made in USA no suelen ser precisamente de lo más esperado en el festival de los leones alados. Sólo hace falta echar una mirada a la lista de ganadoras de dicho evento para darse cuenta que existe una clara inclinación a no acercarse a ese peligroso desfiladero que conduce hacia Hollywood, el lugar común en el que ningún cineasta, (que se preste de ser respetable) quiere caer.
Cuando la pantalla presentó en aquel memorable 2005, la historia de un par de Adonis vaqueros que compartían y departían sus sueños y preocupaciones diluidas en café de olla bajo el arropo de unas montañas espléndidas que recordaban al idílico mundo Marlboro, uno comenzaba a sospechar que aquel manojo de músculos con sombrero, rudeza de trabajo duro y sudoroso, no cuadraban con la sensiblería y delicadeza propias de otros ambientes menos rurales y más esponjados… y de pronto sucedió, el amor entre el desaparecido Heath Ledger y Jake Gyllenhaal sucedió.
Vaya usted a saber; que si el frío los llevó a abrazarse, que si las llamas de la fogata hicieron lo propio con sus encendidos corazones, que si mi esposa era Anne Hataway, que si fue el aislamiento y la supervivencia, que si el gran Gustavo Santaolalla y su música, que si me resbalé… Seamos honestos, la cinta es buena en la justa medida que se valoran las magníficas actuaciones de los protagonistas masculinos, (¡Esos llantos con mocos, esos besos apasionados y esa tristeza contenida!)Pero de eso a ganar el codiciado felino del cine, ahí sí que tengo mis reservas. Ya sé que mi querido colombiano Bedub no estará de acuerdo, pero considero que aquí al jurado le ganó la afinidad (con todo respeto) o estaban demasiado indispuestos (léase: hasta la madre de drogas y/o alcohol), o ya de plano no había otra propuesta mejor.
El caso fue que con león o sin león “Secreto en la montaña” fue una cinta taquillera, enarboló la bandera del arcoíris, puso a la escena gay en la mira (como si no lo estuvieran constantemente), abrió y cerró la censura, le dio tres premios de la Academia a la película, un BAFTA a Jake Gyllenhaal y lo más increíble, se rindió ante el modus gringus.
Juzgue usted mismo, véala, comente y debata.
Vera Drake (Mike Leigh, 2004)
Ganadora del festival de Venecia del año 2004. Vera Drake es una mujer mayor quien tiene una clara devoción por su marido y sus hijos, los adora y ellos la idolatran. Es muy servicial con sus vecinos, cualquier problema en el que ella pueda ayudar, con mucho gusto lo hace y siempre tiene una hermosa sonrisa en su rostro. Sus días son tranquilos hasta que una extraña visita policial que exige la presencia de la señora en la comisaria, todos sus allegados no logran imaginar la razón de la citación.
Cuando los policías le dicen que una mujer a quien “ayudó” casi muere en el hospital, Vera sorprendida cuenta que ella ha hecho el procedimiento muchas veces y que siempre es muy cuidadosa en la higiene del mismo. El policía extrañado le pregunta que si sabe que el aborto ilegal es un delito, ella dice con toda seguridad que no, que ella sólo trataba de ayudar a alguien que lo necesitaba en ese momento.
Un tema que sin ninguna duda es delicado más por creencias que por razones, el director Mike Leigh lo afrontó sin sutilezas. El aborto se practicó porque la madre no tenía los recursos económicos suficientes, la salud mental de la madre sufriría, y tantas y tantas razones para que una mujer tome una decisión de esa naturaleza y que sólo le compete a ella. Vera fue un ángel que auxilió a muchas mujeres desesperadas ¿Quién es usted para juzgar?
The Wrestler (Darren Aronofsky, 2008)
La mejor cinta de Darren Aronofsky con el mejor Mickey Rourke que veremos en mucho tiempo y que nos narra la trágica pero valiente vida de Randy “The Ram” Robinson en sus últimos días como peleador profesional de la Lucha Libre.
En esta historia vemos como Randy malvive peleando en pequeños eventos que no le dan ni para pagar la renta ni costear sus medicamentos y cosas similares. Pero nada de eso importa porque una vez que nuestro acabado héroe se pone el disfraz y sube al cuadrilátero todo eso se vuelve irrelevante mientras los gritos de la multitud apagan sus preocupaciones.
Pero las cosas se complican en serio cuando por razones de salud no puede volver a pelear y debe hacer lo que más teme, enfrentar el mundo real donde es uno más de la multitud y debe lidiar con una vida personal completamente destrozada.
Un excelente drama donde Rourke hace una gran mancuerna con Marisa Tomei quien encarna al interés amoroso del peleador y nos entregan una gran actuación.
Esta cinta fue despreciada por snobs de la Academia mientras que Venecia se rindió por completo ante esta ágil y conmovedora historia de un hombre que prefirió ser la leyenda The Ram que vivir una gris y solitaria vida.
¡Hasta la próxima!
Belle De Jour (Luis Buñuel, 1967)
Las cincuenta sombras al más puro estilo Buñuel. Es una adaptación libre basada en la novela homónima de Joseph Kessel y con guión del mismo Buñuel y del actor y guionista francés Jean-Claude Carrière. Interpretada por la bellísima y actriz fetiche del director aragonés, Catherine Deneuve y por los acotes Michel Piccoli y Jean Sorel. Nos cuenta la historia de una mujer casada que ama a su marido pero no puede mantener relaciones sexuales con él. Por otro lado su mente se alimenta de fantasías y deseos sexuales que la excitan y, entonces, decide empezar a trabajar clandestinamente en un burdel por las tardes, mientras que por el día desempeña el papel de mujer felizmente casada y casta.
Es una de mis películas favoritas del director turolense y en donde, aparte del tema de la sexualidad, también se tratan otras constantes recurrentes en su obra, como son la religión y la burguesía.
En Belle De Jour, realidad y ficción están presentes, lo cual llega a crear una confusión en el espectador y hace dudar si todo lo que se ve realmente es fruto de la imaginación de la protagonista.
Ivan’s Childhood (Andrei Tarkovsky, 1962)
La Infancia de Iván, película ganadora del León de Oro en 1962, pero más importante aún, debut cinematográfico de uno de los mejores autores audiovisuales de la historia (si no es que el mejor), Andréi Tarkovsky. Y presenta una de las historias más significativas de temática bélica dentro del séptimo arte. Con ésta obra, Tarkovsky, nos cuenta la historia de un niño huérfano durante la segunda guerra mundial, que es usado por el ejército rojo para misiones de infiltración. Más que seguir una narrativa lineal, estamos ante una obra onírica, simbólica, que habla sobre la libertad y el amor en tiempos de guerra sin caer en los tradicionalismos barrocos, una obra con esas características que cuenta con semejante impacto emocional solo habla de la fuerza de su visión como artista.
El blanco y negro no es solo una decisión estética, es un manifiesto que desde los primeros fotogramas nos predisponen ante el trágico estado y destino de su protagonista, el final no es reconfortante porque es un reflejo puro de los horrores de la guerra, no hay espacio para nada más, no existe una conclusión satisfactoria, nos recuerda que si bien no todos mueren en la guerra, nadie es realmente un sobreviviente. Una obra maestra.
Rashomon (Akira Kurosawa, 1950)
Un asesinato, una investigación, cuatro testigos físicos o espirituales, una joya de thriller que llevó al Maestro japonés a componer su primera obra maestra y hacerse no solo de uno de los primeros Leones de Oro, sino también del Oscar. Esta joya es una pieza esencial para la comprensión ya no digamos del género del crimen, sino del lenguaje cinematográfico en general, y es que a pesar del tono sobreactuado y extravagante que Kurosawa en la mayoría de las ocasiones imprimía en sus actores (También un elemento muy común en la filmografía nipona), la línea cronológica de los hechos y las 4 tangentes que conforman el film y giran alrededor de un mismo eje argumental son tan precisas que el espectador, acogido y tenso por una interesante historia, se convierte también en juez y partidario de los 4 testimonios, todos ellos con el objetivo de descubrir la vileza de la condición humana.
No hay verdades que eliminen las mentiras, y estas últimas no son suficientes para poder escudriñar la realidad. A través de flashbacks de los testigos presenciales (El supuesto asesino, la esposa del asesinado y un leñador) y espirituales (La misma víctima a través de una médium), el maestro teje una telaraña de misterios de los cuales somos nosotros también testigos gracias a una recreación intimista de estos.
Llena de suspenso, aventura, simbolismos y bajo un ambiente que nos traslada al Japón del Siglo XII, Kurosawa abrió las puertas de occidente gracias a este legendario film, uno de los mejores thrillers de la historia que hasta la fecha brilla por su originalidad.
1 Comment
Hola
Qué interesantes y Buenas recomendaciones
Y la de El tigre?