Sonita: Una voz que rapea contra los matrimonios forzados
La ganadora del Premio del Jurado y el Premio de la Audiencia en el Festival Sundance 2016, llega a México de la mano de Ambulante. El documental “Sonita” de Rokhsareh Ghaem Maghami, una producción Alemania, Irán, Suiza, que nos adentra en una de las millones de historias de las “Niñas-Novias” en Medio Oriente.
Sonita Alizadeh, es una adolescente afgana que vive como indocumentada en Irán, sueña con convertirse en una cantante famosa de hip-hop, pero su familia tiene otros planes para ella: venderla en matrimonio por 9,000 dólares.
Sonita es ilegal en Irán, no tiene acta de nacimiento, ni documentos que la identifiquen. Parte de su familia huyó de Afganistán por la presión del régimen talibán. En Irán entró a un centro de ayuda para estudiar mientras trabajaba como afanadora. A los 15 años es admiradora de Rihanna y Michael Jackson, le gusta cantar y quiere utilizar su voz para expresar sus sentimientos, pero sus sentimientos son tan fuertes que el género pop no le es suficiente, por lo que incursiona en el rap.
Con sus amigas bromea y platica sobre sus sueños, sin embargo hay un tema que acapara las pláticas de estas niñas y adolescentes: ¿cuántos años tiene tu futuro esposo?, ¿cuánto van a pagar por ti? Sonita obtuvo su primera “oferta” de matrimonio a los 10 años, cuando ni siquiera sabía de qué se trataba el asunto. A los 16 su familia no puede esperar más, a uno de sus hermanos mayores le urge pagar por tener su propia esposa, por lo que la familia ha fijado un precio de 9,000 dólares en la dote de Sonita. Dinero que no hace más que hacer girar un ciclo de sufrimiento en donde se vende una niña para comprar otra.
La documentalista iraní Rokhsareh Ghaem Maghami conoció a Sonita mientras era refugiada, durante tres años se mantuvo a su lado filmando las muchas historias que salieron de esta jovencita: pobreza, inmigración, guerra, identidad, sexismo y tradiciones que rayan en la locura. Durante este tiempo Rokhsareh Ghaem ayudó a Sonita a filmar el video de “Brides for Sale” (Novias a la venta) con el que se da a conocer en YouTube.
La directora queda atrapada en la historia de Sonita, se ve en la disyuntiva de filmar una dura realidad o interferir para cambiar la historia. Rokhsareh Ghaem se convierte en protagonista de su propia película al pagar 2,000 dólares a la familia de rapera emergente para comprar seis meses más de su soltería. ¿Traicionó la esencia del documental? Sí, sin duda. Sin embargo acciones como esta marcan nuestro destino.
Me viene a la mente la fotografía de aquel niño sudanés famélico tomada por Kevin Carter, por la que ganaría el premio Pulitzer y para lo cual espero buen rato para que el buitre abriera sus alas sobre el niño para agregar más dramatismo a la imagen, lo cual no consiguió. Tomó la foto y siguió su camino. La documentalista iraní no pudo permanecer al margen de los sucesos. Intervino, cambió la historia, puede que ahora su película no sea un documental, tal vez es un rarísimo cuento de hadas en medio oriente. Uno de esos en donde la princesa nunca besa al sapo y el príncipe no existe, uno en donde la protagonista es una rapera afgana que se transforma en activista para dar su voz en contra de los matrimonios forzados.
*Las novias niñas no son exclusivas de un solo país, religión o idioma. A pesar de que el matrimonio infantil es ilegal en la mayoría de las Naciones, es una tradición más antigua que las leyes que intentan evitarlo. En Afganistán la mayoría de las adolescentes son explotadas y sufren una violencia inimaginable a manos de sus maridos y parientes políticos. No tienen acceso a la justicia. Se atribuye al matrimonio temprano la alta tasa de deserción escolar, en donde el 82 % de las niñas abandona la escuela antes de terminar sexto grado. Se estima que 70% de las afganas son analfabetas. En 2010 se registraron 100 casos de inmolación en el hospital de Herat. Setenta y seis de las mujeres murieron a causa de las quemaduras. Expertos y activistas sospechan que el matrimonio temprano es lo que lleva a cada vez más mujeres a recurrir a esos actos desesperados y a menudo fatales.
4 Comments
Gracias por compartirlo, una historia modificada, el dolor y sufrimiento de una niña, que es tocado y modificado por la documentalista Iraní
Muchas gracias a ti David por comentar. En el cine documental hay muchas historias dolorosas que contar, ojalá que el difundirlas ayude a erradicar estas conductas. Saludos!
Gracias Mrs. Punisher por la reseña y por dejarnos saber que existen joyas como ésta en el tan viciado y abusado mundo del cine.
Gracias Max! Me gusta el cine con causa, por desgracia mi lado critico se vence ante los temas, tal vez no sirvo para criticar este tipo de cine, pero en estos casos mi enfoque va hacia la difusión. Qué bueno que le gustó! Saludos y muchas gracias por su comentario!