The Martian: Circo, maroma y payasos en la NASA y el espacio
Es lamentable como Ridley Scott ya ni siquiera puede manejar con decencia un lineamiento tan plano como el que estamos a punto de analizar, uno en el que un supuesto conflicto espacial con vastas posibilidades dentro de sus elementos científicos y tecnológicos se convierte en no más que una parodia cómica de varios films que engloban el cliché de la misión espacial y el repetitivo y curioso recurso del rescate a un personaje que resulta incluso en su grotesca participación lo mejor del film. Si bien con Prometheus uno en su suprema negación y/o ignorancia aún podía culpar a los guionistas de tan abominable bodrio narrativo excusando a Scott dentro de la “complejidad” de su trama, aquí ya no hay justificación alguna para poder tachar al cineasta como se lo merece: un adulador insoportable del molde narrativo más comercial y absurdo que, en su proceso de conversión a ser un “Ron Howard” mucho más malo que el propio Howard, es la viva imagen de todo el falso testimonio que el lenguaje cinematográfico puede proyectar: una historia escrita con las patas, con conflictos fugaces, nula en emotividad, soportada en la comedia para solventar sus carencias directivas y actorales y finalmente, repleta efectista para intentar justificar su falta de lógica y veracidad en su situación, todo esto alabado por el público debido a que simplemente… es chistosito.
Como dijeran en una película ganadora del Oscar de apenas el año pasado, esto es la tesis de como un artista se convierte en una celebridad, de cómo el arte se convierte en un puto circo de 3 pistas sin ninguna coherencia entre sus actos ¡Es oficial! The Martian avala a Scott como el próximo rey del relleno televisivo, destinado a ser el próximo Apolo 13, solo sin el ritmo, ni el entretenimiento, ni el encausamiento dramático necesario para ser tomado aunque sea un poco en serio. The Martian es como aquellas parodias de “Esta no es otra tonta película americana” o “Scary Movie” (“Rescatando al Astronauta Ryan” hubiera sido perfecto), tomando un poco de allá, un poco de acá y un poco del insolente guion, Ridley Scott lo logra de nuevo: Hacer cuestionarnos “¿Quién carajos dirigió Alien y Blade Runner?” Esta mierda no pudo ser ¡Me niego a creerlo!
¡En la primera pista! El mago Drew Goddard
Basado en el libro de Andy Weir, The Martian narra la historia de un astronauta botánico que es dejado por muerto y abandonado en Marte. Su ingenio, talento y comedia son lo único que lo puede mantener con vida mientras en la NASA prepara una estrategia para poder salvarlo.
Goddard, mejor conocido como “El tipo que escribió World War Z”, vuelve a utilizar su recurso narrativo preferido, el cual dicta que, frente a una problemática que nadie sabe resolver, resolvámosla a través de la respuesta más predecible posible, el humor fortuito y la lógica de un fugaz personaje que se sacó la respuesta de…, de… ¿A quién le importa? ¡Todo se resolvió! En otras palabras, el guion de The Martian refiere a la incapacidad narrativa de poder hilar lógicamente una consecución de hechos o estatutos previamente delimitados o estructurados; esto da a lugar a que el espectador tenga que aceptar explicaciones y/o soluciones absurdas que distan años luz de la complejidad del supuesto conflicto planteado.
La película sucede en dos líneas narrativas, la de Marte y la de la NASA. Mientras que la primera transcurre de una manera decentemente coherente aceptando un monologo y performance cómico, la segunda nunca se decide si ser una exposición realista de la NASA o bien una sátira de la misma, mostrando su inutilidad, su falta de credibilidad hacía con los medios y sus chistes entre los más altos directivos que a la larga resolverán el conflicto debido a que un “barrendero” y/o “estudiante” (No les quiero arruinar la película) sale de la nada y lleva a cabo un sketch cómico dentro de un gag de El Señor de Los Anillos para explicarles a las mentes maestras de la NASA como resolver esto ¡Pero eso no es todo! Esto no sería posible sin la ayuda de dos chinos que viendo la televisión deciden donar un cohete porque si ¡No le miento! Así es de The Martian.
Por si esto fuera poco, parece que la fugaz genialidad de la narración en Marte y en el espacio se le termina pronto a Goddard, por lo que este decide recurrir en variadas ocasiones a los mismos chistes relacionados a la música disco y al excremento de los personajes para cumplir el capricho de duración de más de 140 minutos. Si a esta repetición de diálogos le agregamos la nula delimitación de todos sus personajes y los débiles y forzados lazos románticos y/o de superación personal, solo nos falta una cosa, pasar a la segunda pista de este circo
¡En la segunda pista! El trapecista Ridley Scott
No me voy a gastar ni un párrafo con lo hecho por Scott. El director decide que su montaje saltará de Marte a la NASA de la manera más descabellada e inoportuna posible. Volvemos al mismo problema, quitar la atención sobre su elemento más atractivo (The Martian) para cortar la emotividad y la estructura del relato con las sandeces sin pies ni cabeza de las escenas en la NASA. Esto causa dos cosas: la primera, que este salto desemboque en un clímax nulo de emoción, y la segundo, que la intermitencia convierta a su film en algo aburrido, incluso y por más extraño que parezca, eliminando el supuesto humor de Goddard y sus chistes sobre la música de los 70’s y la caca espacial.
¡En la tercera pista! Los payasos
¿Y qué fuera de un circo sin los payasos? Matt Damon es su líder; su stand up de comedy central y sus chistes repetitivos que también incluyen los éxitos “Me como un chingo de papas con cátsup y ahora sin cátsup” “¿Qué carajos quiere la NASA?” “Exploto como en Interestelar” y “Vuelo como Iron Man”, son la piedra angular de la narración de The Martian donde el actor una vez más será rescatado ¡Pero no por el Gobierno de Los Estados Unidos y dos chinos bien buena onda! Sino por su amplio e inagotable sentido del humor incluso en el lecho de su muerte ¡Que bárbaro Damon! ¡Qué actuación! Llévate la Palma de Oro y el Oscar (Sarcasmo)
Lo acompañan Kristen Wiig y sus chistes de “Trabajo en la NASA pero estoy rodeada de idiotas”, Jeff Daniels y sus chistes de “Soy el director de la NADA pero no tengo puta idea de lo que pasa aquí”, Chiwetel Ejiofor y sus chistes de “No sé quién es mi personaje pero al parecer soy el nexo entre todos los idiotas de la NASA”, Sean Bean y sus chistes de “Hola, soy Boromir y esta es la NASA”, Michael Peña y sus chistes de “Soy el estereotipado mexicano astronauta religioso chistosón que siempre tengo algo que decir” y finalmente Sebastain Stan, Kate Mara y Jessica Chastain que figuran como los asistentes o aguadores de todos estos payasos.
¡Aplausos para todos ellos! The Martian así se trastorna en una comedia de humor “accidental”, donde el remate de un chiste se da cada 10 minutos frente a situaciones mal estructuradas y desarrolladas
¿Hay que verla?
No. Lo simplón de su historia ni siquiera le da a Scott para poder entablar una entretenida narración. “Aburrida” quizá sea la etiqueta más adecuada y grave para The Martian independientemente de su obvia y vergonzosa exposición humorística y su absurdez narrativa de nuevo consecuencia de resoluciones fortuitas que no tienen ninguna base lógica.
Las actuaciones son horrendas, comenzando por un ya sobrevalorado Matt Damon, que si bien le salva 30 minutos de narración a Goddard y a Scott, la sobreexplotación de los chistes a la larga lo convierten en una interpretación nefasta comulgada la falta química y la mofa en cuanto al sistema de la NASA.
¿Quién carajos dirigió Alien? ¿Quién dirigió Blade Runner? ¡Kubrick! Ayúdanos
11 Comments
Al fin alguien le da con un caño a este vende humo!
Lo único destacable fue que.. me regalaron snacks junto con los pochoclos… ah no cierto que eso no tiene nada que ver con Scott. Que se pudra!
Saludos indignados desde Argentina
Saludos mi estimado, a sus órdenes que para eso estamos jaja
Saludos mi estimado Fett; Está mejor, peor o igual que “Moon” con Sam Rockwell (2009)?
Digo, para ir a verla o mejor de plano esperar el dvd.
Saludos
Mi estimado, Moon tiene lo suyo no sea así de malo jajaja
The Martian es ……. una mamarrachada, si quiere mi opinión, puede obviarla por el resto de su vida y no pasa nada
Saludos estimado
Mi estimado ahora sí lo hicieron enojar jajaja!! Pues a mi me pareció entretenida, creo que le sobran algunas cosas, pero claro está muy muy lejos de lo que Scott hacía en el siglo pasado, incluso recicló metraje de Exodus para hacer las montañas y desiertos de Marte, sólo le añadió el tono rojizo. Gracias por la reseña y recuerde que hay cosas peores, como el regreso de Crapúsculo!!! Ahora sí, Kubrick sálvanos!!!
Ese dato si no me lo sabía estimado, como si aún faltará mas por odiar jajajajaj
Gracias a usted mi estimado por tomarse el tiempo y compartir distintos puntos de vista
Ni me recuerde de eso que defeque sangra cuando supe
Saludos estimado
¿Qué cojones es un pochoclo? ¿qué habéis hecho con nuestro idioma?
Por cierto, mejor el libro.
Espero que si por que la película SUCKS jajaja
Saludos estimado
Jaja. Son “palomitas de maíz”, joder tío! xD
En desacuerdo totalmente, me parece lo mejor de Ridley Scott en muchos años. En cuanto al humor que tanto criticas, ya se encontraba en la base de toda la película que es el libro (que por cierto en el film esta muy rebajado en comparación).
Mi estimado Baker, quizá en el libro funcione pero en la película el humor me parece absurdo al punto de rayar en una parodia
Saludos, gracias por la apreciación