The Midnight Sky: La Mejor Joya SF desde 2001 Odisea del Espacio
Para muchos es claro que George Clooney ha desarrollado a lo largo de su carrera una serie de cualidades narrativas que lo han posicionado como uno de los directores americanos más interesantes de la actualidad, pero creo que nadie estaba preparado(a) para esta epopeya espacial que sin temor a equivocarme, ha quedado ya registrada en los anales fílmicos del culto gracias a su perfecto balance entre aventura, lógica científica y emotividad, convirtiéndose no solo en la mejor película del año, sino quizá en la mejor película de ciencia ficción desde 2001: Odisea del Espacio (y me atrevería a compararlas en magnificencia).
La madurez de Clooney ha sobrepasado su discurso político – ambientalista, una característica que junto al cordón umbilical hacía el humor de los Coen, no le había permitido despegar su verdadero talento. Esto queda al desnudo con Midnight Sky, pues Clooney relega sus maniqueísmos sociales para adentrarse en un arriesgado relato que permite al espectador compenetrarse de manera íntima con todos y cada uno de los personajes en pantalla, algo extremadamente inusual, pero que aquí se logra gracias a la estructura perfecta de todos sus elementos que de inmediato proyectan un relato tan humano como tenso, tan real como simbólico.
La sinopsis puede compararse apenas con la punta de un grandioso iceberg: Después de una catástrofe apocalíptica, un científico estacionado en el ártico intenta comunicarse con una misión espacial que regresa a la Tierra, y así poder evitar que los astronautas – tripulantes perezcan ya en un inservible planeta. Si bien este argumento le permite a Clooney de manera sutil poner de relieve su mensaje ambientalista (y político de paso), el verdadero valor es la gran habilidad narrativa que desprende a lo largo de dos horas con un ritmo prodigioso, lleno de momentos emocionantes y repletos de suspenso que se adhieren perfecto a todo el discurso existencialista – cuántico y hasta tridimensional que conforma esta rica joya metafórica.
Así pues todo el resto del iceberg es una pieza maestra que alcanza el mismo nivel tanto en su parte contemplativa (la fotografía es fastuosa), como en su reflexiva, casi excluyendo los diálogos para dejar que sus poderosas imágenes y momentos hablen por si solos, desde el vacío del espacio rodeando a aquellos errantes astronautas, hasta la natural soledad del personaje de Clooney en la Tierra, que de una u otra manera conectan de manera simbólica creando el halo de misterio necesario para el gran clímax, sin duda uno de los grandes giros y conclusiones en la historia de la cinematografía y que incluso juega con elementos del expresionismo alemán.
Sobra decir que su originalidad trasciende su influencia, pues aunque Clooney toma elementos de Gravity, Intestellar y The Martian, entre otros relatos espaciales, tanto la pasión como la frescura tanto de su odisea general como del viaje individual de cada uno de sus personajes, hacen que esta cinta supere en cada uno de los aspectos científicos, lógicos y aventureros a las antes y conocidas mencionadas.
En el caso de las actuaciones es obvio decir que estamos ante un casting que aprovecha el fantástico guion – adaptación para encausar las mejores de sus carreras. Clooney también protagonista, podría ganar su segundo Oscar con la mano en la cintura, creando un trágico personaje bajo un amplio registro dramático muy complejo. Así mismo es impresionante como su interacción con solo voz ensalza el trabajo histriónico de los demás “tripulantes”, resaltando la excepcional interpretación de un Demian Bichir, que con esto ya podría augurarse una mejor intervención en Hollywood al lograr tal vez la mejor actuación de un mexicano dentro de una cinta estadounidense en la historia. Ni hablar de Felicity Jones y la química con David Oyelowo, los cuáles crean un romance inaudito y de una naturalidad inconmensurable en este entorno espacial.
Remarcar también las cualidades técnicas, pues los efectos sirven al mismo relato y no viceversa, haciendo que la gran imaginaría de Clooney se vea transformado en secuencias hermosas y trepidantes.
En fin, en este DÍA DE LOS INOCENTES en verdad espero que ignoren toda esta crítica y por ende la mierda que acaba de filmar George Clooney, que en resumen es exactamente lo opuesto a lo descrito aquí. No, ya en serio, estamos ante una colisión patética de argumentos copiados y combinados en un molote de incoherencias narrativas sin precedentes. Plana, mal actuada, ilógica, sin emoción, tensión, empatía, desarrollo de personajes, estamos ante una de las peores películas del año y del género de ciencia ficción.
2 Comments
Por poco y la añado a mi lista de pendientes. ò_ó
Jajajaja Master no lo haga nunca