Cars 3: Otro torpe e infantil comercial para vender carritos
Hay poco qué salvar dentro de un proyecto tan mezquino como en general ha sido la saga Cars de Pixar y en específico la tercera parte en cuestión, la cual se enfoca de nuevo en un objetivo más mercadológico que cinematográfico, buscando ampliar su mercado de venta de mercancías y juguetes a los jóvenes y nostálgicos padres y a las niñas ávidas por cambiar su cochecito Barbie por uno de la escudería Rusteze.
Siguiendo la historia del Rayo McQueen dentro de sus competencias en la Copa Pistón, nuevos modelos de autos de carrera comienzan a surgir haciendo que nuestro héroe tenga que abandonar las pistas de la manera más dolorosa. Incorporándose de nuevo a su entrenamiento y con una nueva directriz de su escudería que incluyen innovaciones tecnológicas y avanzadas tácticas de entrenamiento, McQueen queda a cargo de su instructora Cruz Ramírez, una peculiar y metódica modelo nuevo que acompañará al Rayo hasta su carrera de última oportunidad en Florida.
La historia es tan predecible que da pena y pocas sorpresas. El director y guionista Brian Fee, recién egresado de Pixar en su primer proyecto a cargo del banquillo, recoge todo el argumento de la primera parte para solo remanufacturar una correcta y muy incluyente evolución para todos sus personajes. Un tono demasiado infantil engloba así lo que en resumen es una moraleja por un lado de aceptación, y por otro de superación personal, cambiando de protagonista hacia la recta final de un clímax y serie de secuencias pastiches de la película iniciadora de la saga.
Basta por favor de justificar a los proyectos animados “solo porque son de caricaturas”. Este encausamiento de entretenimiento mediocre, refrito del manual Pixar, expone también una falta de humor alarmante. En una de las decisiones correctas del libreto, Fee decide desprenderse casi por completo de los cansinos personajes “patiño” de McQueen (incluso la reducida participación de Mate parece un castigo por la abominable Cars 2, la peor película Pixar); sin embargo en su incorporación de nuevos y pobremente moldeados personajes, el cliché y las pocas situaciones de humor hacen que la travesía del héroe se sienta forzada y reciclada en sus varias paradas hacia la carrera final.
Pero no podemos acusar a Pixar y a sus alumnos por la falta de emotividad. Hacia el clímax, a pesar de ser una reproducción de pies a cabeza de aquella primer final de la Copa Pistón, Fee logra que los aspectos incluyentes, tanto feministas como raciales, jueguen un papel importante en esa impresión apropiada de aventura y pequeña dosis de suspenso para los más pequeños de la casa.
Por su parte el doblaje no parece exagerar ahora en modismos mexicanos que muchas veces degradan la versión final, pero dentro del reparto original con Owen Wilson, Chris Cooper, Nathan Fillion, Armie Hammer, Kerry Washington, Bonnie Hunt, Tony Shalhoub y Larry The Cable Guy, resalta el dato de la réplica de la voz del ya difunto Paul Newman, repitiendo su papel de la Cars del 2006, su último trabajo en vida.
En conclusión, Cars 3 encantará a las niñas, los padres millennials se sentirán nostálgicos y pudientes para gastar en navidad y en cumpleaños y el público en general dirá mediocremente: “Bueno, al menos es mejor que la pasada”. Por cierto, nuevamente el cortometraje previo es superior al largometraje (Búsquenlo después, se llama Lou).
7 Comments
Y? Compraré mas carritos… jajajaja… amargados sin infancia, ardidos porque mattel no les dió comisión… Mi hijo aplaudio y se emocionó como nunca… ese es el objetivo… que lo disfruten los niños…
Es una ventaja que no nos den comisión, por eso nuestro medio no tiene concesiones ni favores con las distribuidoras. Esperamos que su hijo no vea este comentario, se puede decepcionar de los argumentos de su papá, ofendiendo.
Saludos a su chamaco y a usted estimado, y que bueno que entendió, que al final el objetivo es vender y gustar, y eso no va de la mano de la calidad cinematográfica.
JAJAJAJA… como me haces reír… resulta que uno no puede ser sarcástico cuando ustedes usan el sarcásmo para el 99% de sus “reseñas”… y que bueno que el objetivo (no sólo de esta, sino de cualquier película) es vender porque no tendrías nada que hacer con tu vida, de no ser despotricar con el trabajo de los demás… el que sea de calidad o no (que por cierto eres el menos indicado para decidir, ya que no tienes ninguna autoridad en el tema) es lo de menos, ya que lo que le guste a uno, no necesariamente le gusta a otro… buenos días pseudo critico de cine.
Se equivoca mi estimado, y esperemos que su hijo sea educado en que es bueno y que es malo, porque si importa. Y por todo lo contrario, yo creo que usted es también indicado para dar una opinión, siendo o no experto en nada (que eso parece jajaja)
Saludos estimado y orgulloso padre de familia XD
Saludos, sobrevalorado y omni presente pseudo critico de cine XD
recuerdo haber visto la primera de ”cars”’ a los once o doce,pero en ese momento me parecía un filme conflictivo por no decir insatisfactorio:por momentos quería dar una historia seria y personajes complejos pero por otro optaba por un humor y situaciones dignas de una sitcom infantil. Creo ver de lejos el problema de pixar: no saben por que parte de publico encaminar sus películas (niños o adultos). Nunca eh visto un chiste adulto pero tampoco historias que no se sientan tan simples o moralistas. Alguna vez Walt Disney dijo ”’estas muerto si solo te diriges a niños,después de todo los adultos son niños crecidos”’, en fin,lo único que salva a pixar hoy es que sus personajes tienen mas carisma que los de otras productoras,lo que los vuelve rentables y que tienen el mejor render.
Muy de acuerdo con usted estimado, al menos con esta saga, la cual siempre ha sido encausada mas para los niños y la vendimia
Gracias por comentar