Las 5 Mejores Películas de Tim Blake Nelson
Nacido un día como hoy en Tulsa, el buen Tim Blake Nelson se ha sabido posicionar como uno de los más queridos y solventes actores de reparto desde los 90, década en la que comenzó su carrera actoral como artista callejero y con algunos trabajos menores en la reciente televisora de MTV.
Carismático y versátil, Tim es uno de esos rostros y voces inconfundibles a lo largo del crecimiento fílmico de cualquier millennial, apareciendo en varias producciones comerciales, indies o de naturaleza festivalera a la orden de cineastas como Sipielberg, los Coen, Malick y/o hasta en productos de Marvel, completando a lo largo de su carrera casi un centenar de títulos entre cine y televisión.
Tim es también músico, productor, guionista y director, en este último rubro teniendo seis largometrajes, dos de ellos rindiendo frutos en circuitos indie con venas críticas.
Celebremos los 59 años de Tim Blake Nelson con sus 5 Mejores Películas
5 – Watchmen (2019)
Una serie que postergó el dominio de esta adaptación dentro del rubro o subgénero del superhéroe, conservando su calidad narrativa a pesar de despegarse de la producción fílmica y centrarse más en los acontecimientos originales de la novela gráfica. Con algunos elementos forzados en cuanto inclusión se refiere, los directores fueron muy hábiles en restarles importancia gracias a una historia centrada en el buen desarrollo de sus personajes y su misterio alrededor de un tema racial y social excelentemente estructurado. Blake Nelson aparece como “Looking Glass”, un vengador enmascarado experto en psicología, que se convierte como es de costumbre, en uno de los personajes más carismáticos y queridos de la serie gracias a la sobria presencia del actor
4 – The Ballad of Buster Scruggs (Ethan & Joel Coen, 2018)
Compendio de cortos que resumen no solo la historia del género, sino también de sus variados tópicos y estereotipos: el pistolero, el bandido, los ambulantes, el minero, los colonizadores y los cazarrecompensas enfundadas en historias musicales, cómicas, de suspenso y romance, todas con ese toque siniestro característico y en donde la muerte reposa en un ambiente más formal y común al tratarse del salvaje oeste. Quizá los últimos pasajes se muestren sobrados, pero son los primeros 4, y en especial el primero protagonizado por Blake Nelson, el que además de otorgar el título a la cinta, representa un festín pintoresco y musical alrededor del vengador – pistolero y su cambio de batuta generacional
3 – The Grey Zone (Tim Blake Nelson, 2001)
De entre las 6 cintas dirigidad por Nelson, sin duda la que destaca es este brutal drama basado en hechos reales, sobre los eventos suscitados en Auschwitz durante la Segunda Guerra Mundial, donde los prisioneros judíos a cargo de operar las cámaras de gas, organizarán un motín a modo de redención, que tendrá funestas consecuencias. Lo más destacable no son solo sus pedazos de actuaciones (un Keitel formidable), sino la habilidad con la que el director escapa de los sentimentalismos baratos dentro de este tipo de dramas, para encausar un llanto gráfico extraordinariamente cínico y muy cruel, denotando también un muy buen ritmo y calidad narrativa. Tim debería preguntarse si no sería mejor pasar a director de tiempo completo
2 – O Brother Where art thou? (Ethan & Joel Coen, 2000)
Coqueteando con el surrealismo, los Coen imprimen una singular e inclasificable gracia a la adaptación más americana que pueda existir sobre la Odisea; una road movie que toma los elementos culturales, artísticos y sociales más comunes de la gran depresión para de manera hilarante desarrollar una metáfora sobre el absurdo modus vivendi americano concentrado en la violencia, el racismo y el sistema criminal. Un andar de simbolismos puros para desplegar en su no solo su negro humor, sino ciertos apuntes que hacen a este viaje onírico una traducción cuasi infantil o una fábula alrededor de la ineptitud y corrupción política, el góspel y el KKK. Resaltan Clooney, Turturro y por supuesto Blake Nelson como los tres protagonistas de La Odisea
1 – Old Henry (Potsy Ponciroli, 2021)
Aunque es uno de los western más sustanciales y de argumentos más ingeniosos de los últimos años, la novatez de Ponciroli no le deja crear una obra redonda, pero al menos si una que hipnotiza a través de sus potentes actos de inicio y cierre; el director establece un tono realista tanto en su ambientación como en las clásicas escenas de tiroteo, delineando tanto a sus héroes como a sus villanos de una manera uniforme y acorde al género. Por otro lado, es a través de un soberbio Blake Nelson que la redención ficticia de cierto mito histórico (que todo amante del género conoce ya sea a través del cine o de la historia misma), funciona como el giro necesario para llevar a este film a ser uno de los mejores en su género de los últimos 10 años.