Red Sparrow: El nuevo tropiezo de JLaw

Es muy sabido que haber conseguido un Oscar como Mejor Actor/Actriz no es garantía de que las nuevas películas del susodicho tengan sello de calidad; no siendo esto a veces un impedimento para terminar viendo algo que desde el trailer y la promoción general venía quedando como una cinta para el olvido. Tal es el caso de Jennifer Lawrence y su nuevo filme Red Sparrow, que incluso acaparó reflectores desde su Premiere internacional, pequeño escándalo para pasar menos desapercibida entre los más curiosos.

Operación Red Sparrow es una adaptación de la novela homónima escrita por Jason Matthews y está dirigida por Francis Lawrence (que ya había trabajado con la rubia en la trilogía de The Hunger Games). La historia va de una bailarina del Bolshoi, Dominika Egorova, que tras una fractura se ve obligada a retirarse de la danza. Forzada por las autoridades rusas, como única forma de mantener sus privilegios y los de su madre enferma, la chica es reclutada por los servicios secretos de su país. Dominika formará parte de un programa ultrasecreto de la KGB llamado Gorrión Rojo. Allí, aprenderá el arte del espionaje utilizando métodos de seducción, un sistema muy eficaz para sacar información a los informadores enemigos.

Jennifer Lawrence es sinónimo de taquilla. No importa si es una biopic de una chica que vende trapeadores, un relato surrealista poco apreciada como Mother o una historia de chica femme fatale con desnudo incluido (especialmente si hay desnudos). El conflicto aquí es no saber si la intención de la película es ser un blockbuster o un thriller, pues no funciona como ninguna de las dos opciones, dejando un sabor insatisfactorio inclusive desde sus primeros 30 minutos de duración.

Nada parece tener sentido, todo se nota como una casualidad exagerada y el morbo que intentan insertar se nota desencajado además de desencantado. La misma predictibilidad de los futuros acontecimientos hace que la película se sienta todavía más larga de lo que es (si es que 140 minutos pueden ser aún más eternos), resultando en un ejercicio lejos de ser interesante y cuya intriga se ve desvanecida cuando nos damos cuenta que estamos muy aburridos; y sí, demasiado tarde para un “giro de tuerca” final que se veía venir kilómetros antes (¿o eran minutos?).

Lawrence luce desperdiciada mientras finge un acento ruso cuando habla inglés, se alcanzan a escuchar comentarios en el público del tipo “¿tanto Oscar para esto?” al salir de la función… Ni siquiera el cantado romance funciona cuando se ve más forzado que un niño en misa de domingo. Y es que uno se pone a pensar en las razones por las que eligen hacer este tipo de cintas cuando seguramente les llueven cantidad de ofertas. El también polémico tema de su desnudo (especialmente cuando era un tema sensible después de la filtración de sus fotos en 2014) destaca por morbo más que por su inclusión en la historia, que si bien concuerda con el argumento que quiere exhibirse, parece algo malgastado que fuera queda de ser algo artístico para la obra en general.

Total, 2 horas y 20 minutos son algo que hay que pensar antes de desperdiciar y aquí mi recomendación: Si le gana la curiosidad y no quiere dejar pasar la oportunidad de verle sus bien dotados atributos a JLaw, no deje de ver esta película pues la tortura de ver a la actriz en peluca le valdrá la pena; pero si bien, esto no es de su interés en lo más mínimo, tenga por seguro que me agradecerá cambiar esta entrada al cine por otra a alguna cinta nominada a los premios de La Academia, que ya son este domingo.

Etiquetas:  

Acerca del autor

Kim Tobias   @kimm_tobias  

Enamorada del cine clásico y los guiones astutos. También odio los finales felices... ["La estimulación visual es la razón del cine. De otra manera podríamos simplemente apagar las luces y llamarlo radio" R.A.]


1 Comment

  • Una basura que nos retrotrae a los peores años ochenta, con su carga ideológica y pútrido enfoque maniqueo. Por si no se lo imaginaban, los rusos son los malos. Ohhhhhhhh.
    Saludos.

    Reply

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

*

*

*