The Banshees of Inisherin: Historia del hombre resumida en la necedad de dos irlandeses

Romper un vínculo emocional siempre será doloroso. La ruptura afectiva puede tener millones de explicaciones, unas más racionales que otras, sin embargo, en muchas ocasiones las causas terminan por pasar a un segundo plano cuando las consecuencias son devastadoras.

The Banshees of Inisherin es una película que trata el tema de las heridas de una separación, y que a pesar de contar una historia a primera vista, simple, dentro de cada uno de sus personajes, situaciones, esconde un simbolismo universal alrededor de la humanidad y sus conflictos.

“Me pareces aburrido”

La película se centra en una isla ficticia irlandesa llamada Inisherin, donde se nos presenta a dos individuos completamente distintos: Colm (Brendan Gleeson), un músico con tendencias depresivas, y Padraic (Colin Farrell), un ignorante pero bonachón sujeto, quienes han cultivado una amistad de años.

El conflicto comienza cuando Colm comienza a ignorar a Padraic, que anonado por esta situación lo confronta por su comportamiento, y el músico admite que ha estado actuando de esa manera porque ya no quiere ser su amigo. Esta respuesta deja a Padraic devastado, pues comienza a tener las típicas preguntas de una ruptura, especialmente pensando que cometió un agravio en contra de su examigo, pero la respuesta a la actitud y decisión de Colm es tan simple: “Me pareces aburrido”

La película tan solo dedica 20 minutos a explicar las causas de esta situación para enfocarse en el tema principal: las consecuencias de la ruptura, comenzando hacer una distinción entre sus dos protagonista; Colm es un hombre reflexivo y más caviloso que su examigo, su miedo a la muerte ha terminado por ser la piedra angular de sus decisiones al punto de que quiere empezar a construir un legado (desde su profesión) para no ser olvidado; por otra parte Padraic es un personaje sencillo, humilde, un poco solitario y cuya única compañía eran Colm y su hermana, su única preocupación es por tomar una buena pipe, comer, procurar que sus animales se encuentren bien, y el amar y ser querido, poco le importa lo que ocurra a su alrededor o construir un legado. Con todo este contexto, la ruptura con su excompañero le comienza a causar tristeza y a despertar sus mayores miedos (la soledad, por ejemplo). A pesar de ser completamente diferentes, nuestros protagonistas tienen algo en común, son sumamente necios, y eso los llevará a desarrollar un conflicto en el que algunos miembros de este pueblo costero se verán involucrados.

El fantasma de la guerra

Posteriormente, el director y escritor comienza hacer una extrapolación pasando de una situación personal a una más universal (la más obvia, La Guerra Civil Irlandesa), añadiendo ciertos elementos donde los personajes de Padraic y Colm  representan a una clase social: Padraic comienza hacerse amigo de Dominic, un joven impulsivo pero inteligente que es la metáfora de la juventud idealista que se encuentra en cada sociedad, y como generalmente este sector de la población es más apegado a las clases menos protegidas; mientras que el músico comienza hacerse amigo del padre de este joven, Peadar, un policía cruel que termina por ser la representación del poder autoritario, añadiendo a que Colm comienza a ver con un sentimiento de desdén, y de superioridad a su examigo, siendo una representación de las clases más burguesas. Aunque algunos personajes comiencen (indirectamente) a tomar un bando, la hermana de Padraic (Siobhan) se vuelve el punto más neutro del conflicto, siendo quizás el personaje que funciona más introspectivo hacia el público.

El conflicto no solamente va escalando en intensidad. Las dudas y miedos de Padraic se empiezan a traducir en hostilidad, lo que termina por fastidiar a Colm, quien comienza a tomar medidas más radicales; estas situaciones se convierten en una metáfora social donde las heridas del conflicto se vuelven una guerra personal, donde la violencia y la mutilación se convierten en la respuesta a este dolor y en una constante. El agotamiento por el conflicto genera la huida de algunos individuos (migrantes) buscando la tranquilidad y mejores oportunidades, la juventud es quien termina por pagar la peor parte, pues la guerra provoca que las condiciones para un futuro digno sean inexistentes, provocando que la planta que crece en la tierra, se marchite al final del invierno. El gobierno y la autoridad se vuelven más agresivos, siendo factores vitales para la tragedia.

La película en un tercer término muestra que la trama se está desarrollando el contexto de la guerra civil irlandesa, aunque esta se encuentre alejada de ese clima ¿En una cuestión intangible qué diferencia hay entre las hostilidades del campo de batalla a las agresiones (indirectas y directas) entre dos examigos que tienen prácticamente a un pueblo de cabeza? Al final el prólogo de los dos conflictos se dio por un intento de desapego, se desarrollaron gracias a una serie de irracionalidades, culminan con una serie de ataques que llevan entre los pies a todos lo que se encuentran alrededor y el infierno de la disputa es el mismo, siendo las constantes; la muerte, la soledad y el dolor pues el miedo a los mismos son el detonante del conflicto y de manera cíclica son la consecuencia de la pelea. Por ellos se empieza y por ellos se termina.

Al final el discurso de la película alrededor de las rupturas afectivas es una descripción de un fenómeno causa-efecto que no importa si se refiere a un conflicto entre amigos o a una guerra civil, es una constante universal; las separaciones son causadas por miedos personales generalmente asociados a la muerte, la soledad, y el dolor, estos al no ser comprendidos por ninguna de las dos partes generan un conflicto violento que termina por acarrear soledad, dolor y en algunos casos muerte (no piensen como tan en la física sino en la emocional), acabando en un ciclo sin fin que en muchos casos ni siquiera terminara con la partida física sino que puede ser heredado por generaciones. ¿La empatía y el perdón serán la llave para romper estas cadenas? Quizás.

La ironía cíclica

El manejo de la cámara es increíble, el sonido de la cinta, la fotografía, el diseño de producción no son solamente elementos ornamentales, sino que también guardan un significado con la trama. Hablamos de que dos de las constantes de la historia terminan siendo la soledad y el dolor, sentimientos que han sido traducidos al lenguaje cinematográfico a través de una puesta en escena contemplativa, fría, pero que no está introducida únicamente por motivos estéticos, sino que hay una conexión narrativa. Los paisajes bellos pero desoladores, el sonido del viento y del silencio de un lugar con poca población, son el vehículo de transmisión de las emociones de nuestros protagonistas, porque así se siente el rompimiento de un vínculo afectivo, como si estuvieras en una lugar sombrío y oscuro donde la muerte se pasea buscando alguna alma en pena (Otra constante de la historia).  Hay tramas que podrían funcionar en otra atmosfera y el resultado sería lo mismo, pero el director ha conseguido conectar de una manera tan ágil los elementos cinematográficos con la narración, que es imposible imaginar otro contexto donde podría funcionar, lo cual habrá de una casi perfecta puesta en escena.

Adicional, el balance que consigue en tono la cinta es impresionante, hablamos de una historia con tintes dramáticos, pero su director no ha decidido tirarse completamente por un estilo meloso, sino que añade un toque de comedia negra algunas de las situaciones (generalmente las más inverosímiles), adecuado para la trama, pues al final este círculo vicioso donde están nuestros protagonistas no deja de tener un grado de ironía.

Denle todo a Farell

Durante la temporada de premios se ha alabado mucho el trabajo de Colin Farrell, lo cual es completamente justificable, pues su personaje termina por volverse quizás el vehículo emocional principal de esta película. Si bien su papel no tiene una carga psicológica fuerte (en comparación con lo que les gusta nominar en los galardones), no es tampoco sencillo transmitir las sensaciones de soledad y de frustración desde un personaje que en su primera capa es tan simple; ahí radica la proeza de Colin y de porque merece ser considerado la actuación del año

De quienes no se hablan mucho pero vaya que tiene un “performance” alto es Brendan Gleeson (Colm), Kerry Condón (Siobhan, la hermana de Padraic) y Barry Keoghan (Dominic). Aunque el personaje de Brendan es más complejo y de contrapeso a Padraic, termina por generar las mismas sensaciones que el de Farell, complementando el papel de Colin dando quizás “una de los mejores dúos/antagónicos en pantalla”; Condon y Keoghan también funcionan como vínculo emocional de la metáfora de sus respectivos papeles en pantalla, por lo que resaltan y cargan con mayor potencia el mensaje de la cinta.

A resaltar que las actuaciones de todo el elenco se convierten en un aditivo para que los discursos de la cinta tengan mucho más impacto, ya n solamente se trate de cumplir con el papel que se les otorga, sino de entregar un perfil y nivel que ayude a transmitir los objetivos planteados de la película. En ese aspecto los actores ya no son solo maniquíes o adornos, sino conductores instintivos y emocionales de las cintas. Actuaciones de Diez.

Calificaciones

Guion: 3.6 – De los mejores guiones escritos en años y de los más inteligentes, presentando una historia simple con demasiadas metáforas y simbolismos

Dirección: 3.4 – La forma en que el director maneja los elementos cinematográficos y construye la atmosfera conectándola de manera sólida con la narrativa es de alabar

Actuaciones: 2.0 – Ninguno tiene una actuación mediana o cumplidora, todos tan el plus siendo vehículos emocionales importantes

Extras: 0.5 – El diseño de producción, sonido, banda sonora, todo está de diez.

Calificación: 9.5 – OBRA MAESTRA

Sin exagerar, y con la cabeza fría, estamos ante la película más completa de los últimos años; siendo una clase en todos los terrenos: dirección, escritura y actuación. Quizá sea la MEJOR PELICULA (HASTA EL MOMENTO) DE LA EPOCA POST-COVID, que colocará a Martin McDonagh como de los mejores directores y guionistas de culto, quien no solamente ha entregado una obra maestra, sino uno de los manifiestos artísticos que mejor retrata las causas y consecuencias de las heridas de aquellos que un día se amaron de manera filial, y que hoy en un intento erróneo por cerrar esa cicatriz y sanar el dolor, entrarán en un conflicto cíclico que podría llevarlos a la destrucción y muerte.

La historia de la humanidad resumida en la disputa de dos irlandeses necios.

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Acerca del autor

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Actuario/Economista, Amante del Cine, Devoto de Dios, Intuitivo, Curioso, Rockero de corazón, Fanático de los Libros y del deporte de las tacleadas, quesero, colchonero, diablo rojo. "Las estadísticas son la forma en que las matemáticas cuentan las historias" "El arte es una ciencia y el trabajo del critico al igual que el del investigador es exponer sus axiomas y teoremas al mundo" "Estar de acuerdo, en no estar en desacuerdo es saludable"


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