Toy Story 4: Una nueva aventura fantástica y entrañable

Cuando creíamos que ya había acabado, nueve años después de la tercera parte, vuelve la saga infantil más querida de la historia del cine, casi el mismo lapso de tiempo que hubo entre la segunda y la tercera, por lo que la expectativa crece casi al mismo nivel de la nostalgia (y de la inevitable pregunta de si es esto necesario); hacer una película mejor o incluso al nivel de la anterior parece una labor no tan sencilla pero, definitivamente, un suceso del que queremos ser testigos y por el que vale la pena arriesgarse.

Toy Story 4 cuenta una nueva aventura de nuestro vaquero favorito Woody y su pandilla de juguetes, esta vez cuando se van de viaje familiar con Bonnie y su familia. Para ello se añadirá un nuevo integrante al grupo, un juguete que Bonnie creó en el jardín de niños y que se convierte en su favorito, por lo que nuestros amigos tendrán que enseñarle el verdadero significado de ser un juguete.

Dentro de la huella que la franquicia de Toy Story ha dejado para el cine, no solo se encuentra el hecho de ser la primera película de Pixar y la primera en ser realizada completamente por computadora, también forma parte del acervo cultural y animado de toda una generación que ha sido testigo durante 24 años de las aventuras de un grupo de adorables amigos. Hoy adultos, es imprescindible que la 4ta parte de esta historia esté dirigida precisamente a ese público, convirtiéndose ese en el primer reto por superar: complacer a los fieles fanáticos sin dejar de ser una película infantil.

Pero es que si hay algo que caracteriza a esta querida saga, es esa capacidad de ser una película animada que, en medio de todo ese mundo colorido e infantil, parece tener un trasfondo adulto que va además incrementando con cada entrega, situación que también se hace notar en esta nueva, haciéndose más palpable no solo con su ya conocido y audaz humor, sino también con la inclusión de cierto aire de terror que podría causar brincos en los más pequeños.

Y hablando de inclusión, hay bastante que aplaudirle a esta película en cuanto a eso se refiere, pues encuentra la manera perfecta de adaptarse a la época actual, haciéndolo tan natural como es posible por lo que la empatía hace sincronía perfecta con este elemento (¡ojalá así lo hicieran todos!).

La esencia de Toy Story parece estar intocable al mismo tiempo que cuenta con una identidad propia que le da un tono diferente a sus anteriores; tenemos personajes que se sienten auténticos (incluso si son nuevos) los chistes son ingeniosos y funcionan, no hay necesidad de bromas de pastelazo cada 5 segundos, pues es el carisma de cada uno de los juguetes lo que ayuda a construir (nuevamente) una historia que se siente tan divertida como entrañable. Igual de ocurrente y encantadora, es imposible no soltar un par de carcajadas cuando se está tan cómodamente entretenido.

Sin duda alguna, esta es una de las películas que no se pueden ver de manera independiente y que las nuevas generaciones no entenderán si no han visto las entregas anteriores. La nostalgia está ahí, pero es acertadamente involucrada como para no sentirse forzada.

Como comentario adicional, me tocó ver esta película en su idioma original, por lo que no puedo hacer gala de su doblaje al latino, pero no cabe duda de el excelente trabajo que se hace en su versión original; liderados por Tom Hanks como Woody, y esta vez haciendo gala de participaciones como la de Keanu Reeves como Boom Kaboom.

¿Innecesaria? Probablemente, pero eso no le quita lo fantástica e incluso lo creíble que puede resultar ser, dentro de un mundo de juguetes que han acompañado a toda una generación que quizá se niega a dejarlos ir, pero que tal vez encuentre que este es el momento más indicado para hacerlo.

Etiquetas:  

Acerca del autor

Kim Tobias   @kimm_tobias  

Enamorada del cine clásico y los guiones astutos. También odio los finales felices... ["La estimulación visual es la razón del cine. De otra manera podríamos simplemente apagar las luces y llamarlo radio" R.A.]


Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

*

*

*