X-Men: De la peor a la mejor Película

El futuro es mutante, y todo está en manos de Disney en lo que seguramente será un reinicio de toda una saga y era cuando sigan jugando con el tiempo y el espacio tanto en la prodigiosa X-Men 97 como en la venidera Deadpool vs Wolverine. De la mano de Fox para rea, los X-Men alcanzaron a procrear 13  películas  y una serie, divididas en dos líneas temporales, y que en un mundo fílmico atestado por el prefijo “super”, dieron en variados momentos una de las sagas más sustanciales y bien estructuradas de dicho universo, dejando también en definitiva lo que fue el casting de mejor desempeño y mayor talento dentro de todas estas franquicias.

¿Serán los Hombres X los que salvarán a Marvel y a sus Vengadores de las desgracias? Antes de que se estrene la nueva película y con el final de temporada de X-Men 97, demos un repaso a toda la saga, de lo peor a lo mejor

Como invitadas ponemos la serie X-Men y su secuela X-Men 97, las únicas que valen la pena mencionar del universo animado

 

The New Mutants (Josh Boone, 2020)

Un sketch de 90 minutos sobre superhéroes y con tintes de terror a la usanza de “Stranger Things”. Un film tan atropellado que incluso se pensó llevarlo directamente a la plataforma streaming con 6 guionistas acreditados y un desenlace fílmico que parece sobrepuesto. La historia no encaja no solo en su universo, sino en sí misma, con un desarrollo fugaz y patético de cada uno de sus “nuevos mutantes” que significó también la primera piedra en el zapato para muchos de sus actores. Lo peor es que fue vendida como una cinta de terror, lo cual no puede estar más alejado de la realidad, pues con sus diálogos y efectos parece más una parodia accidentada de The Breakfast Club

 

X-Men Origins: Wolverine (Gavin Hood, 2009)

Quizá el montaje de los créditos iniciales sea uno de los más recordados y mejores posicionados dentro de la franquicia, pero a pesar del cierto dominio de Hugh Jackman y el buen villano de Liev Schreiber, toda la película sufre por su inconsistencia y su pobre exposición de efectos y buenas escenas de acción. La ridiculización de todos sus personajes incluso hace que muchos iconos de los comics se conviertan en marionetas infantiloides y otros hasta transformen de manera grotesca toda su esencia. El proyecto Weapon X nunca lució tan imbécil y de paso Jackman se denota cansado, dando su peor desempeño como Wolverine. Una completa mierda, absurda y fuera de lugar que quedaría solo en el recuerdo de lo que “fue” Deadpool

 

X-Men: Apocalypse (Bryan Singer, 2016)

Nunca pensé ver a un villano más inofensivo e inútil que los de Marvel – Disney ¡pero helo aquí! Una adaptación grosera que desperdicia su buena fuente y a su excelente actor como el villano principal; así, el pobre guion, la reciclada acción y hasta el diseño de producción afectó el desempeño de un Oscar Isaacs pre condenado. La pelea final se convierte en el peor clímax de la saga, anulando cualquier aspecto emocional a pesar de que estos fueron intentados meter con urgencia y en cualquier apartado: que si el padre de este, que si el amigo de aquella, que si este traicionó a aquel, pura basura melodramática argumental que resta complejidad y desperdició a uno de los relatos mutantes más solemnes.

 

X-Men: The Last Stand (Brett Ratner, 2006)

Algunas referencias a los comics y ciertos apuntes entre la interacción entre Patrick Stewart e Ian Mckellen son factores que los fans defienden para catalogar irresponsablemente a la tercera parte de la trilogía original como una película infravalorada ¡Pamplinas! La realidad es que es mala con “m” de maligna. Una ilógica y mal actuada aventura que se trastorna en una forzada historia de amor trágico que hace ver a todos los demás mutantes inmiscuidos como una bola de secundarios arrastrados sin ninguna cabida en el guion. Hasta los diálogos de ambos actores mencionados dejan de ser interesantes en un lucimiento injustificado. Nunca los X-Men habían sido tan patéticos e inútiles.

 

Dark Phoenix (Simon Kinberg, 2019)

Creo que su formidable secuencia de acción clímax previa a su horrendo final es el único elemento técnico y/o directivo que la salva de no caer hasta el fondo de esta lista, pero si hacemos caso omiso de esta, este resquebrajamiento narrativo y estructural de todos sus personajes no pudo ser una peor despedida para Fox. Con todos los actores denotando un grave cansancio y hartazgo, un guion incoherente y simplón que de nuevo no saca provecho de su fuente y un desarrollo que durante tres cuartas partes pudo ser mejor narrado en 10 minutos de su similar de caricatura de los 90, esta aventura teenager tiene de oscura lo que Avengers: Endgame tiene de lógica interna ¡Fatal!

 

Deadpool (Tim Miller, 2016)

La irreverencia del personaje y la violenta estética retaron al género, es cierto, sin embargo, el guion es demasiado torpe, el villano carece de carisma y la irreverencia tiene sus límites. Resumir el problema de esta cinta no solo es señalar la innecesaria salida narrativa de aquella buena secuencia del puente, que bien podría haber abarcado todo el desarrollo entregando mejores resultados ¡No! El problema de Deadpool es Deadpool, y es que el héroe es divertido, pero el insufrible Ryan Reynolds no ¿Si me doy a entender? Humor escatológico más humor escatológico es igual a una comedia insoportable. Si no me creen, trátenla de ver dos o tres veces, una verdadera tortura

 

The Wolverine (James Mangold, 2013)

Wolverine adopta una actitud hasta ahora desconocida en su versión cinematográfica, una más salvaje y similar a su naturaleza. Si bien juntarlo con ninjas parecía en un principio una muy mala idea, el obvio amor de James Mangold hacía al personaje hace de esta película una pieza de excelentes momentos desde su principio hasta su final, principalmente si recordamos su acto inicial, la soberbia secuencia del tren bala y finalmente dos que tres encontronazos samuráis, tocando la línea de lo mezquinamente disfrutable; y es que mientras el misterio se revela y el clímax se presenta, el final caricaturesco y moralino le restan mucha credibilidad al relato. Con el tiempo ha logrado subir escalafones

 

X-Men: First Class (Matthew Vaughn, 2011)

Uno de los pocos ejemplos donde los “teenagers” lucen decentes. Desde la selección del director hasta la de su reparto, estos aciertos se reflejan en una historia si bien convencional y sin ninguna sorpresa, también compleja y un poco realista al ser situada en variados pasajes bélicos – históricos. James McAvoy y Michael Fassbender sostienen el nivel de Stewart – McKellen, y el villano de Kevin Bacon, digan lo que digan, es mejor, más imponente, odioso y/o carismático que el de todas las cintas anteriores descritas en este ranking juntas. Un tenso y excelentemente encausado clímax en su final coronan lo que fue una digna sorpresa para originar la segunda línea temporal de la saga.

 

X-Men (1992 – 1997)

De 1992 a 1997, con cinco temporadas y 76 capítulos, la serie animada que revolucionó al mundo de los superhéroes (junto a Batman) y a toda una juventud millennial tenía de infantil lo que el MCU tiene de buenas películas ¡Casi nada! Con complejas teorías sobre viajes temporales, triángulos amorosos y “bromances” entre profesores y sus antagónicos, el desfile de personajes contó sobre todo con una madura narrativa en torno a la aceptación racial con aspectos que van desde los social hasta lo político, pasando también por crudos cuadros emocionales por parte de su protagonistas y variados giros de tuerca. Lástima que desde la temporada 4 la calidad no pudo mantener su nivel, cayendo a este lugar

 

La parodia redentora: Deadpool 2 (David Leitch, 2018)

David Leitch, siendo uno de los mejores directores de acción en la actualidad, equilibra la enfermiza y desmedida personalidad de Reynolds/Deadpool, con una estética que provee mayor protagonismo a sus invitados, haciendo que este sitcom de hora y media se convierta en un producto altamente explosivo y entretenido que literalmente rompe la barrera y fórmula para convertirse en la más actual sátira sobre dicho universo y que solo persigue un objetivo: pulverizar cualquier arco argumental para un despliegue humorístico excesivo que no respeta audiencia, fanáticos, sexo, edad o culto, siendo mucho más honesta y divertida que el 90% del material del  MCU. No es casualidad que Deadpool ahora sea el abanderado de salvarlos

 

X-Men 97 (2024 – )

No solo respeta la esencia noventera, sino que innova en su narrativa al poner mayor ahínco al aspecto racial y sus implicaciones en una globalización trágica y mortal para sus dos razas: humanos y mutantes. Así mismo, y aunque se toma ciertas libertades creativas y de lógica interna con la serie del 92, el incremento de su lado dramático hizo por momentos que todos disfrutasen de un culebrón de alta calidad, con infidelidades, hijos perdidos y hasta padres ausentes como “bastiones” narrativos que se equilibraban con su acción constante. El mayor valor de este regreso es el nivel de tensión de cada capítulo, el cual te hace preguntarte constantemente: ¿y ahora quién se va a morir?

 

X-Men (Bryan Singer, 2000)

Film de significante importancia para asentar varias de las bases que definirían el rubro durante posteriores años, estableciendo a una gama extensa de personajes casi en su totalidad bien estructurados y lo que es más importante, logrando una empatía hacía con el espectador al situar y comparar con agradable pericia la problemática mutante con la realidad del racismo y de la discriminación hacia algunos grupos sociales y/o culturales. Un libreto que alcanza su mayor virtud en los momentos dramáticos, la soberbia química entre Charles Xavier y Magneto acaparan los mejores momentos y diálogos, y Singer construye con un presupuesto debajo del promedio, una pieza de mucho valor para el subgénero en una época anterior a la proliferación

 

X-Men: Days of the Future Past (Bryan Singer, 2014)

Primera cinta del universo mutante que ponía sobre la mesa el sentimentalismo, la nostalgia y el dolor por la pérdida de sus personajes, todo esto gracias una excelente dirección y regreso de Singer a la franquicia que jugaba con una estructura narrativa clavada ahora totalmente en el género de la ciencia ficción, pero nuevamente poniendo relieves dramáticos sobre aspectos políticos, sociales e históricos para intensificar la tensión en sus excelentes secuencias de acción. El encuentro de los actores pasados y futuros resultó un excelente experimento, sobre todo teniendo en cuenta al cambio de protagonista en uno de las mejores participaciones de Hugh Jackman dentro de la saga

 

X2 (Bryan Singer, 2003)

Una aventura altanamente entretenida y bien narrada, consecuencia de un previo rico en trasfondo y con un bagaje mayormente dramático, Singer denota una naturalidad opulenta en la continuidad psicológica de sus personajes sin abandonar de manera astuta la progresión político y gubernamental, en lo que ahora se tornará no solo en la exclusión definitiva de un grupo social discriminado por ser diferente y la respuesta de este ante una amenaza llamada exterminación, sino también en un vehículo que permitirá ahora un rico equilibrio entre la misma calidad dramática e histriónica y el emergente elemento de acción, ahora necesario para preservar el factor X.

 

Logan (James Mangold, 2017)

Pieza sumamente emocional, dramática y de gran poderío estético e histriónico que Mangold – Jackman llevan con sumo cuidado hacía un clímax catártico en lo que en realidad es un híbrido dramático con un homenaje al western, con una referencia al clásico Shane de Stevens. El aspecto paternal que envuelve al film funciona a perfección debido a que se narra desde dos puntos, el del profesor con Logan y la de este con su accidental responsabilidad, logrando emotividad en lugar de forzamiento y la guía narrativa perfecta para elegir un par de secuencias memorables. El final de una era mutante coronada de manera excelsa gracias en mucha parte al compromiso dramático de la dupla Jackman-Stewart.

 

 

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Acerca del autor

El Fett   @El_Fett   cinescopia.com

El más realista y cabrón crítico de cine que pueda existir. Ente sin misericordia que tiene el halago de transmitir a los mortales su sentir y sabiduría en el mejor recinto sobre el séptimo arte. Cinéfilo de corazón y crítico crudo por vocación. Alter ego del Licenciado en mercadotecnia y RRPP Oscar M Rodríguez (FB) Sigueme en twitter @El_Fett


9 Comments

  • Alejandro López March 8, 2017 @ 6:51 am

    Coincido. X-Men 2 tiene algo de lo que todas las demás carecen, un villano tridimensional. El Striker de Brian Cox es el hijo de puta mejor logrado de toda la saga.

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    • Totalmente, el mejor vilano de la saga, seguido creo yo por Kevin Bacon aunque suene hasta anormal. A mi parecer los salvajes del oeste moderno de Logan quedarían en un tercer lugar, hablando de villanos

      Gracias por pasar estimado

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  • Estaban dando The Winter Soldier en la TV y la ví después de regresar de ver Logan; la verdad ya no me atraparon esos brincos y piruetas de la viuda, del capitán y del winter soldier; Me sentí que como usted lo menciona, Logan es como Western de Sergio Leone y lo demas como Cowboy Vs ALiens o el Lone Ranger (la nueva).
    Quizá pase mucho tiempo antes de aceptar alguna otra cinta de superheroes, ver unas mallas y unas capas se me hace haora de chiste. Por cierto, estoy de acuerdo con usted en el conteo.

    Mi opinión

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    • Fíjese mi estimado que Winter Soldier la considero en la misma línea de madurez, una de las pocas o quizá la única de Marvel – Disney, pues estamos ante un thriller que raya incluso en la línea corporativa, una cinta que si bien no tiene una estética violenta, si una historia madura y adulta

      Muchas gracias por pasar estimado

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  • Y ¿la serie Legion donde la pondrías?

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  • Muy recomendable, en Netflix están las dos primeras temporadas y la ultima se está transmitiendo actualmente, deberías darle una oportunidad.

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