Momentos Favoritos del Cine: The Rocky Horror Picture Show

A 47 años de haberse estrenado, The Rocky Horror Picture Show sigue siendo una de las películas más polémicas en la historia gracias a su desfachatada y pintoresca forma de manifestar la liberación sexual a través de una narrativa musical tan divertida como absorbente ¿Morbosa? También, pero la cinta británica de Jim Sharman traspasa dicho elemento para convertirse en una rica amalgama que no solo combina la comedia y el horror, sino también varias referencias al cine clásico de terror y de ciencia ficción (serie b) en una especie de deconstrucción satírica, enfocada precisamente a ese despertar “de la carne” a raíz del “poder” erótico del Dr. Frank-n-Furter, un alien travesti de Transilvania.

Aunque la referencia más directa recae en el relato de Frankenstein, Sharman encuentra su “liberación” creativa a través del género musical y los elementos originales que consigue incrustar a lo largo de su metraje. En una primera instancia pudiéramos encasillarla como una comedia, sin embargo conforme avance el metraje y el espectador vaya cayendo en esta espiral de erotismo, morbo y deseo, el show se irá posicionado como uno de los estandartes del rock dentro del cine, con números estrafalarios, una excelente y ágil dirección entre ellos, pero sobre todo, aportando a la presentación y estructura de cada uno de sus personajes.

Mientras crece el relato, así también su tono oscuro y erótico, llegando a un final que aunque no abandona su comedia negra y su referencia al cine b, con un toque de tensión y drama completa una sustancial metáfora al sexo y la sexualidad.

Por su parte el reparto cumple con creces, llevando a Tim Curry al estatus de culto como símbolo pop aún vigente, siendo homenajeado y reverenciado en decenas de películas, series y cartones a lo largo de estos 47 años. Susan Sarandon también vería aquí su posicionamiento como sex symbol, en un papel que la encasillaría (de buena manera) en otras tantas interpretación de índole erótico

Pero centrándonos en nuestro momento favorito del cine, y muy a pesar de que los números musicales de Tim Curry y del recién fallecido Meat Loaf siguen siendo los preferidos de la audiencia, la elección de su servidor es la magnífica “Time Wrap”, que sirve prácticamente como un preludio de la locura próxima a desatarse (y que de hecho antecede a la casi continúa aparición de Curry y quizá la secuencia más mediática del film).

A destacar en este número la presencia de Richard O’Brien, creador de la obra teatral en cuestión y responsable de su misma adaptación al cine. O’Brien interpreta a Riff Raff, sirviente del Dr. Frank-n-Furter (clara alusión a Igor), el cual de cierta manera lleva la introducción y batuta del número, sin embargo es la presencia del legendario Charles Gray, el que le agrega a “Time Wrap” ese toque humorístico único que hace a esta melodía muy pegadiza y divertida, sobre todo en su magnífico coro:

It’s just a jump to the left
And then a step to the right
Put your hands on your hips
You bring your knees in tight

But it’s the pelvic thrust
That really drives you insane
Let’s do the Time Warp again
Let’s do the Time Warp again

Una cinta de culto, divertida, con una narrativa equilibrada entre sus géneros y referencias, The Rocky Horror Picture Show ciertamente sigue siendo incómoda para cierto sector del público, pero aún necesaria como símbolo del rock, de la comedia y de la liberación sexual dentro del cine

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Acerca del autor

El Fett   @El_Fett   cinescopia.com

El más realista y cabrón crítico de cine que pueda existir. Ente sin misericordia que tiene el halago de transmitir a los mortales su sentir y sabiduría en el mejor recinto sobre el séptimo arte. Cinéfilo de corazón y crítico crudo por vocación. Alter ego del Licenciado en mercadotecnia y RRPP Oscar M Rodríguez (FB) Sigueme en twitter @El_Fett


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